La Junta de Castilla y León ha decidido prorrogar de forma indefinida el cierre perimetral de la Comunidad y el toque de queda en el horario actual. El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha adelantado que las medidas se extenderán en el tiempo mientras dure el estado de alarma.
El anuncio llega después de que se sumaran 1.822 nuevos casos en los últimos dos días, con un ascenso generalizado desde finales de año. Todas las provincias de la comunidad autónoma volverán al nivel cuatro de alerta Covid (de riesgo extremo). Además, el Consejo de Gobierno ha adoptado la decisión de cerrar el interior de los locales de hostelería y restauración, los centros comerciales, gimnasios y salas de juego de las provincias de Ávila, Palencia y Segovia por la alta incidencia que registran.
"Tenemos que anticiparnos y prevenir", ha dicho Mañueco. El presidente autonómico ha subrayado que se mantendrán las limitaciones de aforo, que deberán estar publicitadas en carteles fuera de los establecimientos comerciales y de hostelería. También anunció que se pondrán en marcha nuevas ayudas para la hostelería.
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