Catalá y margallo consideran de justicia la ley que concede la nacionalidad a los sefardíes


El ministro de Justicia, Rafael Catalá, y el de Exteriores, José Manuel García-Margallo, destacaron este jueves los esfuerzos tanto del Gobierno como de los grupos parlamentarios por sacar adelante el proyecto de ley en materia de concesión de la nacionalidad española a los sefardíes originarios de España que justifiquen tal condición y su especial vinculación con España, que el Congreso aprueba hoy.
Ambos ministros manifestaron que esta norma supone un avance histórico, ya que se modifica el artículo 23 del Código Civil y se regula el procedimiento para la adquisición de la nacionalidad española por residencia para la comunidad sefardí.
Según indicó Catalá, el 1 de enero de 1492 se expulsó de España a los judíos sefardíes, un día en que se cerró una puerta a miles de españoles que se vuelve a abrir hoy con la aprobación de esta norma. Esta ley, que entrará en vigor el 1 de octubre, "dice mucho de lo que fuimos, pero también de lo que somos y de lo que queremos ser", agregó, al tiempo que resaltó que la nueva España de Felipe VI es tolerante y abierta.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores indicó que este proceso ha culminado en esta norma gracias a la labor de todo el Ejecutivo. “Estamos aquí reparando una deuda histórica”, subrayó Margallo, quien resaltó una de los aspectos novedosos de esta ley, que permitirá a los sefardíes mantener su nacionalidad cuando se les conceda la española.
Asimismo, manifestó que desde que tomó posesión de su cargo en el Gobierno, ha dedicado “mucho tiempo” a este tema, y confió en que finalmente se llegue a un momento “donde los judíos puedan vivir en libertad”.
GRATITUD
Los ministros, junto a los portavoces de los grupos parlamentarios, participaron al finalizar el debate en Pleno en un acto en la Puerta de los Leones del Congreso de los Diputados, donde posaron junto a representantes de las comunidades judías.
Entre ellos estaba Isaac Querub, que representa a los judíos que viven en España, quien expresó su “enorme satisfacción” y “gratitud” por la puesta en marcha de esta ley y dijo que este día está cargado de “esperanza” y “alegría”, porque se demuestra que España es un país que sabe respetar.
Por su parte, el diputado del PP Gabriel Elorriaga insistió en el Pleno en el gran “nivel de consenso” que ha habido en las diferentes fases parlamentarias de esta ley, que garantiza un “cauce de obtención” de la nacionalidad a los sefardíes. “Es un texto claro, preciso, ágil y enormemente novedoso”, añadió, para solicitar al Gobierno que antes de que entre en vigor esta ley se resuelvan los expedientes pendientes que resultan del procedimiento anterior.
Jordi Jané, de CiU, anunció que exigirá al Ejecutivo el pago de 100 euros a aquellos sefardíes que se encuentren con “una piedra en el camino” y no se les conceda por algún motivo la nacionalidad. Asimismo, valoró el contenido de este proyecto de ley, ya que supone una “reparación histórica”.
Gaspar Llamazares, de Izquierda Unida, dijo que no será su grupo quien vaya a obstaculizar esta ley, aunque agregó que es una “reparación parcial que no satisface a los sujetos y crea situaciones de agravio a otros colectivos”.

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