Cinco comunidades en alerta naranja o amarilla por rachas fuertes de viento

Madrid, 24 nov.- Galicia, Castilla y León, Navarra, Cantabria y Asturias se encuentran hoy en alerta naranja o amarilla por rachas de viento fuerte o muy fuerte que en puntos de Galicia podrán alcanzar los 100 kilómetros por la hora, informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su página web.

En Galicia hay alerta naranja (riesgo importante) en la provincia de Lugo por vientos del sur rolando a oeste que alcanzarán rachas máximas de 100 km/h en A Mariña y 70 km/h en la zona centro, y en A Coruña hay alerta naranja por vientos costeros con fuerza 8 y 9 y mar muy gruesa con olas de hasta 5 metros.

Las provincias gallegas de Orense y Pontevedra mantienen la alerta amarilla (riesgo) por rachas de viento que llegarán a los 80/85 km/h en ambas localidades.

En Nigrán (Pontevedra), el temporal ha levantado parte del tejado de las instalaciones de la piscina de A Ramallosa, si bien este suceso no ha provocado heridos ya que el centro está cerrado a esas horas y en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra), las fuertes rachas de viento han alzado el tejado de una nave en el polígono industrial de Pousadoiro.

Así lo han informado a Efe fuentes de Emergencias 112, que han precisado que las provincias de A Coruña y Pontevedra, las más afectadas por el viento, han registrado una treintena de incidencias menores como caída de ramas, de carteles publicitarios o algún cable del tendido eléctrico, así como el desplazamiento de contenedores en la calzada.

Las comunidades de Cantabria y Asturias tienen aviso naranja por rachas máximas de viento de 110 km/h en la localidad de Liébana y en la Cordillera y Picos de Europa respectivamente.

Castilla y León está en alerta amarilla (riesgo) por fuertes vientos que afectarán al área de la Cordillera Cantábrica y en Navarra, también en alerta amarilla, los vientos soplarán con fuerza en el Pirineo.

La Aemet avisa de que con la alerta naranja existe un riesgo meteorológico importante, fenómenos meteorológicos no habituales y con cierto grado de peligro para las actividades usuales, y con la amarilla no existe riesgo meteorológico para la población en general, aunque sí para alguna actividad concreta.