El cambio climático altera la población de aves comunes de Europa y EE.UU.

EUROPA PRESS

El estudio, que publica la revista 'Science', ha sido liderado por la Durham University del Reino Unido y ha contado con la participación de dos investigadores del Creaf: Lluís Brotons, investigador del CSIC que coordina la Joint Research Unit CREAF-CTFC, y Sergi Herrando, investigador del Instituto Catalán de Ornitología asociado al Creaf.

Los científicos han caracterizado los climas idóneos de diferentes especies de aves --145 especies de aves comunes de Europa y 380 de EE.UU.-- para poder predecir si los recientes cambios en el clima están favoreciendo o perjudicando a las diferentes especies de aves comunes reproductoras.

Con los registros del clima disponibles para el período de 1980 a 2010 han dividido los pájaros en dos grupos de especies: las que potencialmente podían salir favorecidas por el cambio climático y las que podían verse perjudicadas.

Después han comparado cómo han evolucionado las poblaciones de especies de los dos grupos utilizando los datos del mismo período de 30 años.

En ambos continentes se han observado respuestas evidentes y diferentes para cada grupo ante los cambios en el clima: en Europa, las poblaciones que se creía que se verían desfavorecidas por los cambios en el clima han sufrido un declive mucho más acusado de lo esperado, mientras que las poblaciones que se esperaba que se aprovecharían de estos cambios no habían salido tan beneficiadas.

En EE.UU. los resultados han sido similares, pero en este caso las poblaciones de aves beneficiadas por el cambio climático son las que han superado de largo todas las expectativas, mientras que las perjudicadas no se han visto tan afectadas como se pensaba.

Entre las especies que han demostrado sufrir los efectos del cambio climático se encuentran aves comunes como la curruca rabilarga en la Península Ibérica y Europa o el mirlo americano en EE.UU.

"Ambas especies representan buenos ejemplos, a ambos lados del Atlántico, de bajadas poblacionales al sur de su área de cría y al mismo tiempo incrementos en el norte", ha explicado Herrando.

Por otra parte, las poblaciones de ruiseñor bastardo y de Abejaruco, que se distribuyen por el sur de Europa, han incrementado mucho en los últimos años, mientras que las especies del norte como el carbonero cabecinegra o el pinzón han entrado en declive durante el mismo periodo.

CAMBIOS DENTRO DE LA POBLACIÓN

Las poblaciones también han sufrido cambios dentro de la misma especie de ave si se comparan con diferentes áreas geográficas, ya que en Europa especies como el reyezuelo han ido aumentando en las zonas del norte donde los inviernos son cada vez más suaves, pero han disminuido en algunos países del sur, donde los veranos son cada vez más cálidos y secos.

"Si las necesidades climáticas no fueran clave, se podría esperar que la tendencia media de la población de especies en los dos grupos fuera la misma, pero las diferencias que se han observado ponen de manifiesto que el cambio climático está favoreciendo un conjunto de especies sobre otro", ha destacado el autor principal del trabajo, Philip Stpehens.

Según el estudio, otros factores, como el tamaño de las aves, el hábitat en el que viven o su comportamiento migratorio, están afectando las poblaciones de aves, pero no difieren sistemáticamente entre los dos grupos estudiados.

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