Fiestas bajo la lupa

¿Hay que confinar? Relajar las medidas dejaría 9.000 muertos más en Navidad

España ya roza el millón de contagios y ha sufrido 34.210 fallecidos por la Covid. Un informe de la Universidad de Washington augura un escenario incluso más dramático si no se toman medidas drásticas.

Encendido de las luces de Navidad de Madrid
¿Hay que confinar? Relajar las medidas dejaría 10.000 muertos más en Navidad. 
EFE

Esta Navidad no será igual. Los paseos nocturnos para disfrutar de las luces en las avenidas de las grandes ciudades están en riesgo ante la 'amenaza' de la imposición de toques de queda y nuevas restricciones. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha advertido que "vienen meses duros" mientras los gobiernos autonómicos han puesto en marcha planes de contención para frenar el avance de la Covid. De la efectividad de éstos dependerán no solo las Fiestas, también muchas vidas. Un informe de la Universidad de Washington estima que una relajación de las restricciones en España puede dejar casi 9.000 fallecidos más de los calculados de aquí a las Navidades.

El último balance del Ministerio de Sanidad cifra en 34.210 a las víctimas mortales de la Covid. El estudio de los académicos estadounidenses señala que la evolución de esa cifra dependerá de las medidas que se adopten en los próximos días. Hay dos posibles escenarios. El total ascenderá a 45.574 fallecidos si las restricciones actuales se mantienen en vigor, pero un giro de timón mal calculado podría elevar la cifra a 54.227 muertos.

Navarra ha estado bajo el foco durante los últimos días por registrar la mayor incidencia del país: una tasa de 1.002,73 casos por cada 100.000 habitantes, que ha obligado a sus autoridades a decretar un cierre perimetral. Este nivel de transmisión podría tener repercusiones en la mortalidad. La región ha notificado 657 fallecidos hasta el momento que, según el informe, se convertirían en 1.216 si se mantienen las restricciones en el territorio o repuntarían a los 2.635 (1.419 más) si se relajan las medidas durante los meses previos a la Navidad. 

El desastre en Madrid amenaza con ser mayor. La CAM ya registra 10.059 muertes y la estrategia que emprenda el Gobierno regional puede dejar el total en 14.516 o 17.418 fallecidos. La diferencia es de 2.902 víctimas mortales. La capital es el único territorio donde el Ejecutivo central ha impuesto el estado de alarma, pero el tiempo de esta medida se agota... Este fin de semana la CAM saldrá del paraguas del Ejecutivo y todas las miradas están puestas n los nuevos planes. El Ministerio de Sanidad ya ha descartado pedir la prórroga de la alarma, pero tal vez la Administración de Ayuso se vea obligada a solicitarla para implementar restricciones severas como un toque de queda.

La situación en Cataluña es distinta. Sanidad plasma en sus hojas 5.919 muertos por la Covid y el estudio norteamericano proyecta 6.494 para Navidad pase lo que pase. Los expertos han pintado una tendencia lineal en la curva de mortalidad de los riesgos para los próximos meses. Estas predicciones otorgan una calificación favorable al cerrojazo a la hostelería impuesto la semana pasada, que otros políticos como Isabel Díaz Ayuso calificaron de "fracaso" por las consecuencias económicas que podría acarrear. 

Las predicciones apuntan a un claro repunte de las muertes en el país que ya se constata en las cifras actuales. El MoMo, que vigila el exceso de mortalidad por todas las causas, mostró un excedente del 10, 4% con respecto al año anterior durante la última semana de agosto, que subió al 11,2% a inicios de octubre. Ninguna autonomía escapa al repunte de la Covid-19, y las medidas que se adopten en los próximos días serán clave para determinar cuándo se podrá volver, si es que eso todavía es posible, a la normalidad.

España ocupa el sexto lugar en la lista de países con más contagios y el séptimo en cuanto al número de muertos. Los repuntes de esta curva no son tan acusados como los presenciados durante la primera ola de la pandemia, pero el constante aumento de positivos y la creciente actividad en los hospitales pueden ocasionar una marcha atrás. No hay una receta mágica para erradicar la enfermedad ni una vacuna lista para frenarla. Las autoridades deberán estar atentas a estas previsiones para evitar un nuevo descontrol.

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