Defensor pueblo. Becerril lamenta la desidia administrativa ante el abandono de perros


La Oficina del Defensor del Pueblo, dirigida por Soledad Becerril, recibió el año pasado varias quejas relacionadas con el maltrato de animales, la mayoría de ellas remitidas por asociaciones protectoras por la falta de respuesta de la Administración ante sus denuncias.
“Hay demora y lentitud en la tramitación de los expedientes, se superan los plazos fijados, no se da acceso a la información pedida o no se actúa con agilidad”, afirma esta institución sobre los casos de abandono de perros en su informe anual correspondiente a 2013.
Además, el Defensor del Pueblo tramitó quejas relacionadas con fiestas tradicionales, como palomas encerradas en vasijas hasta que son liberadas con la rotura del cántaro a pedradas, en la Semana Santa de Robledo de Chavela (Madrid), y la suelta de patos desde una barcaza en el puerto de Sagunto (Valencia) para luego ser perseguidos y capturados por nadadores.
Peleas de gallos en criaderos y locales no autorizados en una parcela en Mijas (Málaga) y la ‘matanza tradicional’ de un cerdo sin aturdimiento previo antes de su sangrado en Quismondo (Toledo) fueron otras quejas que llegaron a la institución encabezada por Becerril.
Por otro lado, el Defensor del Pueblo abrió una investigación de oficio sobre experimentos farmacéuticos con simios en un centro de Camarles (Tarragona) y recibió la contestación de la Generalitat de Cataluña de que ese lugar tendrá que adaptarse a las nuevas disposiciones de protección de los animales utilizados en experimentación, cuyo plazo finalizará el 1 de enero de 2017.

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