Educación. Wert, dispuesto a reconsiderar los requisitos de acceso a las becas de bachillerato y fp para el próximo curso

El ministro de Educación, José Ignacio Wert, esta dispuesto a “reconsiderar la arquitectura” del borrador de real decreto que regula las becas para el próximo curso, que este miércoles presentó a los consejeros autonómicos del ramo en la Conferencia Sectorial de Educación.
Así lo declaró a los periodistas la consejera catalana, Irene Rigau, para quien la exigencia de una nota mínima de cara a disfrutar de una beca (de 6 en Bachillerato y de 5,5 en FP) que contempla la actual propuesta del Ministerio resulta contraprudecente.
Según afirmó, de implantarse este real decreto, “más de 30.000 alumnos en Cataluña se quedarían sin ayudas”, lo que “atentaría contra la igualdad de oportunidades en el acceso a los estudios posobligatorios de aquellos jóvenes y familias con menos recursos”.
Por eso, Rigau pidió al ministerio que reconsidere esta exigencia de nota y que mantenga el presupuesto total dedicado a becas, así como la continuidad de ciertos conceptos para percibir ayudas como “transporte, residencia o compra de libros”. El texto presentado por Educación contempla una ayuda común de 200 euros que sustituiría estos supuestos.
Para Rigau, la petición de un 5,5 en FP sería adecuada, pero un 6 en Bachillerato es “demasiado” y por ello se felicitó de que el ministro, dijo, “esté dispuesto a replantear la estructura del real decreto”.
También la consejera de Educación de Extremadura, Trinidad Nogales, pidió “una modulación en la exigencia de las notas” y abogó por “tener en cuenta las diferencias educativas y socioeconómicas existentes en las distintas autonomías”.
“En Extremadura tenemos un paro juvenil y un abandono escolar muy elevados”, prosiguió, con lo que si se pide un 6 para mantener las becas en Bvachillerato “muchos jóvenes que han quedado fuera del sistema y otros muchos cuyas familias carecen de recursos podrían verse descolgados”.
Con todo, Nogales subrayó que Extremadura es partidaria de “reconocer el esfuerzo” con las becas, pero defendió que estas exigencias se “deberían suavizar”.