Washington, 10 feb.- Estados Unidos condenó hoy el atentado perpetrado contra el presidente del Parlamento iraquí y destacado representante de la minoritaria comunidad suní, Osama al Nuyaifi, y alertó del riesgo que presenta el terrorismo en todo Irak.
Una portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, condenó "rotundamente el ataque de hoy en el convoy" de Al Nuyaifi, a quien definió como un "fuerte aliado de los esfuerzos de Estados Unidos en Irak", y mostró su alivio porque saliera ileso del ataque.
"El ataque de hoy ejemplifica el peligro que representan los grupos terroristas para todos los iraquíes, y la importancia de que los líderes iraquíes de todas las comunidades sigan trabajando juntos para aislar a los grupos militantes del resto de la población", indicó Harf.
"Estados Unidos se mantiene del lado del pueblo iraquí y seguirá trabajando de cerca con los líderes políticos y de seguridad iraquíes para combatir a quienes cometen actos sin sentido como este", agregó.
Al Nuyaifi, junto a su hermano y gobernador de Nínive, Azil al Nayaifise, se vio envuelto en un atentado dirigido contra el convoy en el que viajaban por la zona de Al Gafran, en el sur de Mosul, capital de Nínive.
Este tipo de ataques, que alcanza a importantes figuras del poder iraquí, evidencia la situación de inseguridad que vive el país en los últimos meses, pero también alerta sobre el aumento de la tensión y violencia sectaria, lo que podría agravar más aún la crisis que vive Irak.
Desde hace más de un mes, varias zonas de la provincia de Al Anbar, en especial las ciudades de Ramadi y Faluya, son escenario de combates entre las fuerzas gubernamentales y grupos radicales, aliados a su vez con tribus suníes, en enfrentamientos que han causado cientos de víctimas.
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