Egipto. Motines en las cárceles ponen en riesgo de tortura a varios detenidos, según amnistía


Amnistía Internacional (AI) ha puesto en marcha una "acción urgente" para que los ciudadanos contacten con las autoridades de Egipto ante el riesgo de tortura u otros malos tratos que corren dos detenidos tras sendos motines carcelarios por las protestas sociales que vive este país en los últimos días.
Los detenidos son Mohamed Abu Essaoud Ismail y Mohamed Abdel Fateh Basyouni y se encuentran en las prisiones de Wadi Natroon II y Fayoum, respectivamente, según informó AI. La organización asegura que ambos se hallan sometidos a detención administrativa, sin cargos ni juicio, pese a que los tribunales han ordenado reiteradamente que se los deje en libertad.
Además, sus familias están preocupadas y temen que las autoridades los hayan sometido a tortura u otros malos tratos. Amnistía señaló que otras personas detenidas podrían encontrarse también en la misma situación.
Mohamed Abu Essaoud Ismail, de 50 años, telefoneó a su hermano Ahmed desde fuera de la prisión de Wadi Natroon II (noroeste de El Cairo) el pasado 30 de enero, cuando, según varios informes, los guardias abandonaron el centro tras amotinarse los internos.
Ahmed fue en su vehículo a recoger a su hermano a la prisión, pero fueron detenidos por un agente del Departamento de Investigaciones de la Seguridad del Estado, al que acompañaban un grupo de personas armadas con palos.
Ahmed pidió que dejaran a su hermano volver a casa hasta que la administración de la prisión pudiera garantizar su seguridad y dijo que estaba dispuesto a comprometerse por escrito a llevarlo de nuevo a la policía, pero el agente no le hizo caso y se llevó a Mohamed, sin dar a Ahmed ninguna información sobre lo que se iba a hacer con su familiar.
Posteriormente, Mohamed fue trasladado a otro lugar, donde estaba recluido junto con unos 50 hombres más en una pequeña celda, y en los días posteriores se negó a la familia el acceso a él y se le impidió llevarle su medicación contra la diabetes.
Por su parte, Mohamed Abdel Fattah Basyouni, de 24 años, telefoneó el pasado 29 de enero a su hermano desde la prisión de Fayoum (sur de El Cairo) y le dijo que habían incendiado las celdas y la prisión estaba ardiendo. No se ha sabido nada de él desde entonces.
Amnistía pide a los ciudadanos que escriban "inmediatamente" en árabe, inglés o su propio idioma al ministro del Interior y el fiscal general, con copia al viceministro adjunto de Asuntos Exteriores para los Derechos Humanos, instándoles, entre otras peticiones, a que garanticen la seguridad de Mohamed Abu Essaoud Ismail, Mohamed Abdel Fattah Basyouni y todos los detenidos que puedan hallarse en situación de riesgo, que revelen su paradero y que les permitan el acceso a un médico y a sus familiares.

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