El 25 % de las personas con ictus son dependientes a los 6 meses de la lesión

Córdoba, 17 may.- El 25 por ciento de las personas que sufren un ictus cerebral son completamente dependientes para realizar las actividades de la vida diaria a los seis meses de sufrir la lesión, mientras que tres de cada diez pacientes se ve obligado a usar silla de ruedas en sus desplazamientos.

Así se ha puesto hoy de manifiesto durante el 50 Congreso de la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF), que se celebra hasta mañana en el Palacio de Congresos de Córdoba.

Estos datos, según ha informado hoy en un comunicado la organización del mismo, han sido aportados por el médico rehabilitador del Hospital Aita Menni de Bilbao, Juan Ignacio Marín, quien ha añadido que la mitad de los afectados sigue presentando al medio año del ictus una disminución de la fuerza motora o parálisis parcial.

El ictus, según Marín, es la cuarta causa de muerte en países desarrollados y la primera causa de discapacidad en el paciente adulto, y ha apuntado cómo el cerebro tiene cierta capacidad de recuperación tras sufrir lesiones.

Asimismo, ha subrayado que en el período agudo "todos los esfuerzos asistenciales van dirigidos a la no progresión del daño y en el período subagudo las técnicas de rehabilitación están enfocadas a maximizar la plasticidad cerebral".

Sobre las técnicas para la recuperación de las lesiones, ha informado de que hay sistemas basados en cinta de marcha mediante un arnés de descarga que disminuye parcialmente el peso del mismo.

Entre otras técnicas, ha destacado que los robots en manos y brazos pléjicos "ayudan a mantener la flexibilidad de los tejidos y reducen la resistencia al movimiento pasivo".

Por otro lado, durante la sesión de hoy expertos en rehabilitación cardíaca han expuesto que trabajan en la elaboración de recomendaciones en cardiopatía isquémica.

La rehabilitación cardíaca de pacientes que han sufrido un infarto de miocardio se basa principalmente en el entrenamiento físico, la educación sanitaria para controlar los factores de riesgo cardiovascular y la intervención psicosocial.