El alcalde alavés en huelga de hambre pide el acuerdo sanitario con La Rioja

  • El alcalde de Oyón (Álava), Rubén Garrido (PP), en huelga de hambre desde ayer para reclamar asistencia sanitaria para los ciudadanos de La Rioja Alavesa, ha urgido hoy al departamento vasco de Sanidad a ponerse en contacto con el Gobierno riojano para solucionar el problema.

Logroño, 17 nov.- El alcalde de Oyón (Álava), Rubén Garrido (PP), en huelga de hambre desde ayer para reclamar asistencia sanitaria para los ciudadanos de La Rioja Alavesa, ha urgido hoy al departamento vasco de Sanidad a ponerse en contacto con el Gobierno riojano para solucionar el problema.

Garrido ha pasado su primera noche acampado frente a la sede del Gobierno de La Rioja en Logroño para exigir a los Ejecutivos vasco y riojano que negocien una salida al conflicto de asistencia sanitaria, que afecta a unos 8.000 ciudadanos alaveses, según ha dicho.

El alcalde de Oyón, que ha asegurado que ha desayunado bebidas isotónicas y no ha pasado frío, aunque esta noche en Logroño las temperaturas han descendido hasta los siete grados, ha explicado a EFE que también ha hablado con el diputado General de Álava, Javier de Andrés, para que se interese por el problema.

Garrido ha señalado que es urgente que responsables del Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco se pongan en contacto con sus homólogos del riojano.

La primera autoridad de Oyón ha recordado que el Gobierno de Patxi López es el garante de la sanidad de todos los vascos y, por ello, ha pedido que redoble "sus esfuerzos para llegar a una solución".

Garrido ha revelado que para esa negociación "ha habido y hay propuestas encima de la mesa" y asegura que las conoce y entiende que "son importantes para el Gobierno de La Rioja".

El alcalde alavés, del PP al igual que el presidente de La Rioja, Pedro Sanz, ha acusado al Ejecutivo riojano de haber llevado a los habitantes de La Rioja Alavesa a "esta situación de desamparo en lo que respecta a la atención sanitaria".

"Por eso estamos aquí, porque se nos ha utilizado como arma arrojadiza en una situación que nunca se tenía que haber dado", sino que se tenía que haber encauzado a través de las mesas interterritoriales de salud que "pare eso existen", ha añadido Garrido.

Y cree que las instituciones están haciendo "lo contrario" de lo que se supone que deben hacer que, a su juicio, es ponerse en contacto para ponerse a trabajar y restablecer la situación.

Mostrar comentarios