Evans terminó en la clasificación provisional por delante del holandés Kevin Abbring (Hyundai i20) y el finlandés Jari-Matti Latvala (VW Polo-R), segundo y tercero, ambos a una veintena de segundos.
A sus 26 años, Evans aprovechó el suelo mojado y el temor de los favoritos para acabar el día en cabeza de la hoja de tiempos.
"A mi llegada no pensaba haber conseguido un tiempo tan bueno. Pero fuimos constantes, no cometimos errores", resumió el británico.
El ya campeón mundial matemáticamente esta temporada, el francés Sébastien Ogier (VW Polo-R) acabó el día décimo, a un minuto y 13 segundos del sorprendente primer líder, tras verse retrasado en la última especial de la jornada.
"Una piedra cortó el neumático de una de mis ruedas traseras. Antes de cambiarla circulé cinco kilómetros con la rueda pinchada, lo que me hizo perder una veintena de segundos", explicó.
El polaco Robert Kubica (Ford Fiesta RS), que compartía la cabeza del rally con Ogier tras la primera especial, bajó luego al quinto lugar, a 40 segundos de Evans, "por falta de confianza" en una carretera con numerosos charcos.
"En este tipo de trazado hay que tener confianza, sobre todo cuando hay agua en la calzada. Es extremadamente complicado", valoró el expiloto de Fórmula 1.
Por la mañana Kubica y Ogier habían sido los más rápido en una primera especial de una treintena de kilómetros cerca de Ajaccio, donde el belga Thierry Neuville (Hyundai) tuvo que abandonar en el primer kilómetro.
La parte trasera d su i20 golpeó con un puente y ya no pudo continuar.
La segunda especial (ES2), que debía disputarse entre Casamozza y Ponte Leccia, en el norte de Córcega, quedó anulada por varios desprendimientos sobre la calzada, debidos a las malas condiciones meteorológicas.
Además de la lluvia y el suelo mojado, los pilotos tuvieron que hacer frente a tramos con niebla que obstaculizaba la visión, en un trazado que se caracteriza ya por la dificultad de rutas sinuosas y estrechas. La presencia de barro y de materiales desplazados por las violentas tormentas añadió un plus de dificultad y peligrosidad a esa primera jornada del rally corso.
El sábado, los competidores de este rally deberían efectuar 130 kilómetros cronometrados en tres especiales, en un itinerario que les conducirá de Bastia a Porto Vecchio.
El rally de Córcega regresa al Mundial WRC esta temporada por primera vez desde 2008. En los últimos años se había disputado dentro de la categoría intercontinental (IRC) o la europea (ERC).
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