El Johnny del s.XXI, la recuperación de un icono

La Fundación San Juan Evangelista, conformada por antiguos colegiales del colegio mayor del mismo nombre, prevé presentar este martes un documento a la Universidad Complutense de Madrid con un proyecto de reapertura del controvertido 'Johnny'.
Según ha comunicado el presidente de la Fundación, Eduardo Santana, en el proyecto destacan iniciativas como la creación de un vivero 'startup' para emprendedores y orientar áreas del centro a escuelas de música y teatro.El Johnny del S.XXI

Como punto fuerte de la reapertura, la fundación pone especial énfasis en la recuperación del club de Jazz del Johnny que albergó en su día figuras tan ilustres de nuestra historia musical como Chick Corea, Paco de Lucía o Camarón de la Isla, el cantaor gaditano realizó en las instalaciones del San Juan Evangelista su último concierto en 1992.
La Fundación San Juan Evangelista califica que su proyecto creará el Johnny de "siglo XXI", en base a un modelo de gestión bajo la responsabilidad de la universidad y las propuestas de los ex-colegiales. El texto se dirige al rector de la Complutense, el recientemente electo Carlos Andradas.
Por otra parte los diferentes grupos de la Fundación están trabajando para definir los detalles económicos y de equipamiento, con el fin de exponer presupuestos concretos, que serán remitidos a la universidad.
Además de toda la faceta cultural el proyecto alberga la idea de que el colegio mayor se convierta en alojamiento de los alumnos universitarios con menos recursos, fijando en el mismo una serie de tarifas asequibles y becas para la estancia en el centro. De esta manera pretenden recuperar el caracter social que tuvo en antaño.La problemática alrededor de un edificio emblema

La pasada semana se desalojaron 300 personas okupas en el centro, todo ello en una operación de gran despliegue orquestada por la Policía Nacional y mediante mandato judicial. El juzgado decretó también que como medida cautelas la Complutense se hiciera cargo del inmueble.
En julio de 2014, Unicaja decidió entregar las llaves de la instalación tras no llegar a un acuerdo con la Complutense sobre la duración de la concesión de la gestión (pues quería prolongarla por 50 años mientras la universidad sólo planteaba 25).

Ello llevó a que la entidad y la Complutense mantuvieran un contencioso, dado que la universidad entendía que Unicaja seguía siendo el concesionario del colegio hasta el año 2038.