El Opus Dei lamenta el daño hecho a la Iglesia por Vallejo si resultara culpable

    • Vallejo Balda fue llamado a trabajar en Roma por la Santa Sede, de acuerdo con el obispo de la diócesis de Astorga en la que estaba incardinado.
    • La prelatura sale al paso de su arresto por la pertenencia de Vallejo Balda a laSociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, para acompañamiento espiritual del clero.
El Papa pide a los obispos que no se dejen ofuscar por "el pesimismo y pecado". Foto: AFP
El Papa pide a los obispos que no se dejen ofuscar por "el pesimismo y pecado". Foto: AFP

La Prelatura de la Santa Cruz y Opus Dei ha salido al paso de la detención del monseñor español Lucio Ángel Vallejo Balda, acusado por las autoridades del Vaticano de robar documentación confidencial del Vaticano.

En un comunicado, desde la institución de la Iglesia Católica han querido expresar su"sorpresa y dolor por estas noticias", toda vez queVallejo Balda es sacerdote diocesano, pero pertenece a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, una asociación de presbíteros unida al Opus Dei, en la que el clero recibe acompañamiento espiritual.

Según ha detallado la Oficina de comunicación del Opus Dei en Roma, Vallejo Balda "fue llamado a trabajar en Roma por la Santa Sede, de acuerdo con su obispo de la diócesis de Astorga, España". También precisa que la prelatura "no intervino ni supo de esa decisión hasta que se hizo pública".

En cualquier caso, destacan desde la institución fundada por San Josemaría Escrivá de Balaguer, "si la acusación se demostrase cierta, sería particularmente doloroso por el daño hecho a la Iglesia", concluyen.Detenido tras el interrogatorio

Este lunes la Santa Sede ha informado de la detención del español Lucio Ángel Vallejo Balda, y la italiana Francesca Inmacolata Chaouqui, que en el pasado fueron respectivamente secretario y miembro del COSEA (Commissione referente di studio e indirizzo sull'Organizzazione delle Strutture Economico-Amministrative), establecida por el Papa en julio de 2013 y posteriormente disuelta.

Según la nota vaticana, ambos fueron detenidos después de los interrogatorios y en vista de la necesidad de proseguir con la investigación de la filtración de varios documentos, que se espera sean publicados en polémicos libros de próxima aparición.

A juicio de la Santa Sede tales publicaciones "no contribuyen de ninguna manera a establecer la claridad y la verdad, sino más bien a crear confusión y (ofrecer) interpretaciones parciales y tendenciosas", algo que -dejan claro- "no es una manera de ayudar a la misión del Papa", concluye.

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