El presunto pederasta se dedicaba a cobrar cuentas de un negocio de coches

  • El hombre detenido hoy como el presunto pederasta de Ciudad Lineal se dedicaba a cobrar deudas en un negocio de compraventa de coches, llegando a extorsionar y a amenazar a los clientes que no pagaban lo que debían.

Madrid, 24 sep.- El hombre detenido hoy como el presunto pederasta de Ciudad Lineal se dedicaba a cobrar deudas en un negocio de compraventa de coches, llegando a extorsionar y a amenazar a los clientes que no pagaban lo que debían.

Según han informado a Efe fuentes de la investigación, Antonio Ortíz Martínez se dedicaba presuntamente a esta labor, aprovechándose de su condición física, ya que se trata de un hombre fuerte, aficionado al culturismo y a las artes marciales.

Trabajar en un negocio de compraventa de coches le permitía tener acceso a varios vehículos, además del que él utilizaba habitualmente, con los que raptar a las menores, para no levantar sospechas, según las fuentes.

Se cuidaba mucho de no dejar pistas sobre sus delitos, pero los investigadores fueron cerrando el cerco sobre él, tanto a través de llamadas de teléfono que realizó -una de ellas cuando estaba con una de las niñas-, y por la captación de una imagen de su coche por una cámara.

"Ha sido como un puzzle, en el que vas encajando piezas y en un momento dado todas casan; aunque quizás el punto de inflexión ha sido la grabación de su coche", han precisado a Efe fuentes policiales.

Antonio Ortíz Martínez, español de 42 años, vivía habitualmente en la casa de su madre en el barrio madrileño de Hortaleza, y supuestamente utilizaba otra vivienda familiar, ubicada en el mismo distrito, para perpetrar los abusos.

Al sentirse acorralado durmió a veces en un coche, y hace unas dos semanas huyó hasta Santander, donde tiene familiares, y donde ha sido arrestado a las 07.30 horas de hoy.

Unos cuarenta agentes, incluido el GEO, han acudido a la vivienda de Santander y le han sorprendido durmiendo.

A continuación le han trasladado a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, donde ha llegado a primera hora de la tarde.

Se le imputan cinco abusos sexuales a menores de entre 5 y 11 años: los cuatros conocidos -perpetrados en septiembre de 2013 y abril, mayo y junio de 2014- y otro anterior.

Además se le atribuyen tres intentos: uno el mismo día que consumó el de abril de 2014, otro perpetrado en Coslada el 25 de agosto y otro ocurrido también en la zona del Corredor del Henares.

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