El "único" coso de carros de madera ya espera a los toros de El Noveno

San Felices de los Gallegos (Salamanca).- El "único" coso construido a base de carros de madera, de los que se utilizaban para la labranza, ya está colocado por los vecinos de San Felices de los Gallegos (Salamanca), para celebrar los encierros de toros de las fiestas de El Noveno, que se celebrarán los días 8 y 9 de mayo.

"Es la única plaza de toros que hoy en día se construye con carros de madera", ha explicado este jueves a EFE el alcalde de San Felices de los Gallegos, Jesús Gómez.

En total, son 47 carros de madera entrelazados con las pértigas, que conforman un coso taurino tal cual se hacía antaño en la mayor parte de los pueblos, cuando, en vez de talanqueras, los mozos se protegían por debajo de los carros y entre sus ruedas.

Así lo recuerda Nicolás Martín, de 80 años, vecino de San Felices de los Gallegos y propietario de uno de los carros, que lo tiene "sólo para las fiestas".

"Siempre he recordado esta plaza con los carros de madera", ha asegurado, mientras ha recordado que antes no existían barreras de protección, ya que lo normativa lo permitía.

Por lo general, los dueños de los 47 carros los guardan en antiguos "cabañales", donde dormía el ganado y que sirven ahora para que estos carros no se deterioren con el paso del tiempo.

Encima de los propios carros se colocan unos tablones de madera, que los vecinos denominan palenques, donde se sube la gente para ver llegar el encierro o para disfrutar de las capeas y festivales.

"Ahora está todo más seguro, porque lo supervisa un arquitecto, pero antiguamente era muy común que los palenques se vinieran abajo y se cayera la gente", ha asegurado otro vecino del pueblo, Pablo Tabárez.

Esta singularidad, que atrae a miles de personas procedentes muchas de ellas de Portugal dada la situación fronteriza, y el hecho de que el Noveno sea la conmemoración de la abolición del impuesto de la Casa de Alba, hicieron posible hace cuatro años que la Junta de Castilla y León la declarara Fiesta de Interés Turístico Regional.

En 1852, los pueblos salmantinos de San Felices de los Gallegos, Ahigal de los Aceiteros y Puerto Seguro ganaron el pleito que mantuvieron con la Casa de Alba y "dejaron de pagar al Ducado de Alba la novena parte de sus cosechas", tras 400 años de imposiciones ducales.