Eléctrica de Florida envía a más de 800 empleados a reparar daños al noreste

  • La compañía eléctrica de Florida FPL envió un equipo de 865 personas para ayudar a restaurar el servicio eléctrico en las zonas del noreste de Estados Unidos golpeadas por el devastador huracán "Sandy".

Miami (EE.UU.), 30 oct.- La compañía eléctrica de Florida FPL envió un equipo de 865 personas para ayudar a restaurar el servicio eléctrico en las zonas del noreste de Estados Unidos golpeadas por el devastador huracán "Sandy".

FPL ha trasladado entre ayer y hoy, además de los especialistas, 250 camiones para labores de recuperación del fluido eléctrico en instalaciones eléctricas desde Virginia a Nueva Jersey.

El paso de "Sandy" por la costa del noreste de EE.UU. ha causado al menos 15 muertes y dejado sin luz a millones de personas.

El equipo de especialistas de Florida Power Line permanecerá en las zonas afectadas "todo el tiempo que sea necesario para recuperar el fluido eléctrico, probablemente de una a dos semanas", señaló hoy a Efe Neil Nissan, portavoz de la compañía.

El objetivo de los técnicos de FPL es ayudar a recuperar el suministro eléctrico lo más rápidamente posible, en un momento en que millones de personas están sin electricidad desde Maine a Carolina del Norte.

Por su parte, el cuerpo de bomberos del condado de Miami-Dade ha trasladado tres especialistas a Washington D.C. para incorporarse a las labores de ayuda que desarrolla la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) estadounidense.

Estarán varios días más para aportar su conocimiento y experiencia en situaciones de catástrofe producidas por un huracán, indicó a Efe Michelle Fayed, portavoz de los bomberos.

El presidente estadounidense, Barack Obama, declaró hoy "zona catastrófica" las áreas de Nueva York y Nueva Jersey afectadas por los vientos huracanados e inundaciones causados por la marejada de "Sandy", que tocó tierra el lunes por la tarde al sur de Nueva Jersey con vientos máximos sostenidos de 130 kilómetros por hora.

El impacto del ciclón ha forzado la suspensión de más de 13.000 vuelos de aerolíneas comerciales en más de una docena de aeropuertos del este del país, y mantiene suspendidas las actividades de los gobiernos en la región.

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