España saca buena nota en inmigración: puesto 11 de 38 países desarrollados

España tiene una política de inmigración con una calidad equiparable a la media de la Unión Europea y por encima de la media de los países más desarrollados del mundo. Así lo refleja el último 'Índice de Políticas de Inmigración e Integración' (Mipex 2015), que ha analizado el nivel de las políticas inmigratorias de 38 países, incluyendo los 28 Estados de la UE y otros 10 más: Estados Unidos, Australia, Canadá, Islandia, Japón, Corea del Sur, Nueva Zelanda, Noruega, Suiza y Turquía.
El Centro para Asuntos Internacionales de Barcelona (CIDOB) es el responsable de la parte española del estudio y este martes presentó sus conclusiones en la sede de la Comisión Europea en España.
España ocupa el puesto 11 de los 38 países. Baja tres posiciones respecto al anterior informe de 2011, como consecuencia de la crisis, pero, sobre todo, por la entrada en la clasificación de países como Australia y Nueva Zelanda, que tradicionalmente han tenido una buena consideración en sus actuaciones en materia de extranjería, según explicó en la presentación la codirectora del estudio, Elena Sánchez-Montijano.
ENTRE LOS 'GRANDES' DE LA UE
En una escala de puntuación de 0 a 100, España saca un 60 en análisis de ocho actuaciones relacionadas con la inmigración, en la media de la UE y por encima del Mipex 38 (52).
Otro dato positivo es que en un ranking encabezado por Suecia (puesto 1) y Portugal (puesto 2), el undécimo lugar de España le coloca por encima de países de referencia como Francia (puesto 17), Gran Bretaña (15) o Italia (13). De los ‘grandes’ del Viejo Continente le supera solo Alemania, en la décima posición.
Sánchez-Montijano resumió que España ha sabido trasponer con acierto las directivas comunitarias sobre inmigración y su política en este terreno “cumple buena parte de los estándares de integración de la UE”, por lo que la crisis no ha logrado hacer mella significativa en su posición en el ranking de los 38.
España obtiene resultados por encima del Mipex en mercado de trabajo, reunificación familiar, residencia permanente y participación política. Aparece en la media del Mipex en salud y acceso a la nacionalidad y por debajo del Mipex en educación (37 puntos) y antidiscriminación (49 puntos).
La mejor puntuación desde el punto de vista de las políticas de acceso al mercado laboral la obtienen los países nórdicos y los nuevos países de migración laboral. España desciende 12 puntos y baja del puesto 4 al 10.
“Aunque las cifras apuntan que el 38% de los ciudadanos no comunitarios residentes en España no están trabajando ni estudiando, las políticas españolas en materia de mercado laboral garantizan un acceso legal igualitario a todos los trabajadores a puestos de trabajo, formación general, becas de estudio y ayudas sociales”, señala el informe.
La población inmigrante entre 20-64 años que recibe educación o formación en España es del 11,3%, respecto al 17% de media de la UE, mientras que la de aquellos que reciben beneficio por desempleo en España es del 39,4% frente al 33% de la UE.
“DEBILIDAD"
La educación escolar es la gran debilidad en las políticas de integración de la mayoría de los países analizados por el Mipex. 25 países no han hecho grandes cambios desde 2010.
Educación “continúa siendo la asignatura pendiente en España”, alertan los autores del informe, que sitúa en esta parcela a España en el puesto número 20 sobre los 38 que analiza el Mipex y donde sólo obtiene 37 puntos de los 100 posibles.
Los alumnos con bajo nivel de alfabetización en España tienen menos probabilidades de beneficiarse de cursos adicionales fuera de la escuela que de media en la UE (alrededor de un tercio de los alumnos inmigrantes reciben cursos de apoyo en España).
En materia de reunificación familiar España obtiene 90 puntos de los 100 posibles, situándose en el primer puesto del índice. Esto se debe en parte a que el proceso es fácil, gratuito y rápido. España está entre los tres países que más reunifica, junto con Italia y Rusia: 67.177 reunificaciones con parejas que no forman parte de la UE en 2013.
En concesión de residencia permanente, España obtiene 74 puntos, situándose en el tercer puesto, detrás de Portugal y Canadá. Se estima que el 60% de los ciudadanos no comunitarios que viven en España tienen la residencia permanente (datos 2013).
Desde el punto de vista de la participación política, España se sitúa en el puesto 15 de los 38 (54 puntos), obteniendo la peor puntuación de Europa Occidental. A pesar de estos resultados, los inmigrantes residentes en España son políticamente activos con una participación reciente del 42% frente al 37% de la UE.
NACIONALIDAD Y SALUD
Respecto a acceso a nacionalidad, España se sitúa en el puesto 21 del Mipex (48 puntos), registrando una de las puntuaciones más bajas de Europa Occidental. En España de cada 100 inmigrantes se naturalizan tres.
Y en cuanto a políticas de salud, la posición de España es ligeramente favorable (ocupa el puesto 12, con 53 puntos), incluso por encima de la media como otros países de la UE15, a pesar de los efectos de las medidas de austeridad. Aun así, en España se da una respuesta escasa a las necesidades específicas de los inmigrantes.
El informe también ha analizado las políticas de antidiscriminación. “Por su falta de desarrollo legislativo”, dice el texto, “España presenta importantes debilidades en la prevención y la lucha contra la discriminación, situándose muy por debajo de la media de la Unión Europea. En España no existe protección frente a la discriminación por nacionalidad y el organismo de vigilancia antidiscriminación previsto es débil y no dependiente.
El informe resalta además que los países europeos más afectados por la crisis económica bajan puntos en el Índice respecto a la edición de 2011: España pierde 3, Grecia 5, Italia uno y Portugal 4.