España y Brasil, los dos países iberoamericanos visitados por Benedicto XVI

  • Ciudad del Vaticano.- En sus cinco años de papado, Benedicto XVI ha realizado 14 viajes por el mundo, uno de ellos a Brasil y otro a España, a donde volverá en noviembre próximo para visitar Santiago de Compostela y Barcelona y en agosto de 2011 para presidir en Madrid la XXVI Jornada Mundial de la Juventud.

Benedicto XVI cumple cinco años como papa en medio de escándalos de pederastia
Benedicto XVI cumple cinco años como papa en medio de escándalos de pederastia

Ciudad del Vaticano.- En sus cinco años de papado, Benedicto XVI ha realizado 14 viajes por el mundo, uno de ellos a Brasil y otro a España, a donde volverá en noviembre próximo para visitar Santiago de Compostela y Barcelona y en agosto de 2011 para presidir en Madrid la XXVI Jornada Mundial de la Juventud.

El primer viaje del Pontificado lo hizo a Colonia, en su Alemania natal, donde presidió en agosto de 2005 la XX Jornada Mundial de la Juventud, una cita que ya tenía comprometida Juan Pablo II, pero que no pudo realizar porque la muerte le llegó varios meses antes.

En mayo de 2006 viajó a Polonia, siguiendo las huellas de Juan Pablo II; en julio pisó por primera vez España, para presidir en Valencia el V Encuentro Mundial de la Familia; y en septiembre volvió a su Baviera natal, visitando Munich, Ratisbona y las pequeñas localidades de Altotting y Marktl am Inn, su pueblo natal.

A últimos de noviembre viajó a Turquía: Ankara, Éfeso y Estambul, donde oró o meditó en la Mezquita Azul de la antigua Constantinopla.

En mayo de 2007 hizo su primer viaje a Latinoamérica, a Brasil, donde visitó Sao Paulo, Aparecida y Guaratinguetá e inauguró la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano (CELAM) en el santuario de Aparecida, la patrona de Brasil.

En septiembre de 2007 viajó en Austria Viena y el santuario mariano de Mariazell.

En abril de 2008 volvió a cruzar el Atlántico, para visitar Washington y Nueva York y pronunciar un discurso en la ONU.

En julio de 2007 se trasladó a Australia, donde presidió en Sídney la XXIII Jornada Mundial de la Juventud.

En septiembre de 2008 viajó a París, primera etapa de su visita a Francia, que le llevó también al santuario mariano de Lourdes para participar en el 150 aniversario de las apariciones marianas.

En marzo de 2009 efectuó su primer viaje a África, visitando Camerún y Angola.

En mayo de 2009 pisó Tierra Santa: Jordania, Israel y los Territorios Palestinos, con parada en el Monte Nebo, Amman, Jerusalén, Nazaret y Belén.

En septiembre de 2009 fue a la República Checa: Praga, Brno y Stara Boleslav.

El 17 y 18 de abril de 2010 se desplazó a Malta, el primer viaje fuera de Italia de este año, en el que también irá a Portugal (mayo), Chipre (junio), Gran Bretaña (septiembre) y España (noviembre).

En estos cinco años de Pontificado también ha publicado tres encíclicas "Deus caritas est" (Dios es amor), de 2006; "Spe salvi" (Salvados en la esperanza), de 2007, y "Caritas in veritate" (Caridad en la verdad), de 2009, de marcado carácter social.

En "Deus Caritas est" resalta que la Iglesia no es contraria al eros, sino que más al contrario lo considera una componente del amor que alcanza su máxima amplitud en la entrega.

En "Spe salvi", presentada hoy y en la que ofrece un horizonte de esperanza a la humanidad, que la vida no acaba en el vacío, que el marxismo ha dejado una destrucción desoladora y que habrá un Juicio de Dios, "que es nuestro consuelo y esperanza".

Con "Caritas in veritate", Benedicto XVI pidió la reforma urgente de la ONU y de la arquitectura económica y financiera internacional y demandó una "verdadera" autoridad política mundial, que tenga poder y se atenga "a los principios de subsidiaridad y de solidaridad".

En este quinquenio escribió "Jesús de Nazaret", su primer libro como Papa.

Benedicto XVI ha proclamado ya 573 beatos, en su mayoría españoles, y 28 santos.

Hasta ahora, el Papa Ratzinger ha celebrado siete ceremonias de canonizaciones, seis en el Vaticano y una en Brasil, en mayo de 2007.

Benedicto XVI retomó al principio del pontificado la costumbre de presidir sólo canonizaciones, mientras que las beatificaciones las oficia el prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos y normalmente en el lugar donde vivió el beato.

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