En declaraciones a Europa Press, Carmen Vida ha manifestado que esta iniciativa tiene como objetivo que, después de "cien víctimas" mortales en la N-IV, cuya saturación ha ido ascendiendo de modo simultáneo al incremento de tarifas del peaje de la AP-4 y los estragos de la crisis, es necesario que "el 101 sólo sea un número y no el nombre de una nueva persona fallecida en esta carretera".
"La gente merece tener la opción de elegir si quiere ir por una carretera u otra y no necesariamente la N-IV, porque la autopista después de tantos años está ya pagada", ha apuntado la mujer, quien cree que hay que "concienciar a todo el mundo" de que es necesaria la liberalización de la autovía de peaje AP-4.
Por ello, Carmen Vida ha hecho un llamamiento para que "se quiten las barreras" de la AP-4 y "no haya que lamentar que los números sigan siendo personas".
La autopista AP-4 se inauguró en marzo de 1973, sujeta a un peaje explotado por una empresa privada, merced a una concesión administrativa de 20 años de vigencia, si bien la misma fue posteriormente prorrogada por el entonces gobierno central de Adolfo Suárez. Durante la época de Felipe González como presidente del gobierno, esta concesión administrativa fue prorrogada nuevamente, extremo sucedido de nuevo durante el mandato de José María Aznar, que determinó prorrogar el peaje hasta el 31 de diciembre de 2019.
El actual gobierno en funciones del popular Mariano Rajoy, en ese sentido, tiene adquirido el compromiso de que la concesión administrativa no volverá a ser prorrogada, si bien para ello habrá que esperar a que acabe el año 2019.
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