Flores y crespones negros homenajean a las víctimas del accidente del tren

  • Banderas de Galicia con crespones negros en los balcones de muchos edificios y flores en la puerta de la catedral de Santiago ha sido algunas de las formas que han elegido los compostelanos para rendir homenaje a las víctimas del accidente ferroviario que el pasado miércoles costó la vida a 78 personas y dejó decenas de heridos.

Luis Martínez

Santiago de Compostela, 26 jul.- Banderas de Galicia con crespones negros en los balcones de muchos edificios y flores en la puerta de la catedral de Santiago ha sido algunas de las formas que han elegido los compostelanos para rendir homenaje a las víctimas del accidente ferroviario que el pasado miércoles costó la vida a 78 personas y dejó decenas de heridos.

A primera hora de la tarde surgió un espontáneo homenaje de los compostelanos y de los numerosos turistas que visitan la ciudad a las víctimas del accidente del tren Alvia al sembrar de flores la verja de acceso a la Catedral.

Así, en apenas unos minutos, decenas de personas han depositado flores en la reja del templo, algunas de ellas acompañadas de mensajes de recuerdo a las víctimas.

"Porque vuestro viaje no termina ahí... Estamos con vosotros", "No os olvidamos", "Sólo muere quien no tiene quien le recuerde", rezan algunos de estos mensajes.

Asimismo, las banderas blanquicelestes de Galicia han colgado de muchos balcones con el correspondiente crespón negro que recuerda la tragedia.

Además, la capital gallega ofrecerá a las víctimas un funeral conjunto que se oficiará el lunes 29 de julio, a las 19:00 horas en la catedral.

El alcalde de Santiago, Ángel Currás, también ha anunciado que propondrá dedicar un parque en la ciudad a homenajear a las víctimas del accidente de tren y a "la generosidad y la solidaridad" de la ciudad, empezando por los vecinos de Angrois, lugar de la tragedia.

El parque, ha remarcado el regidor, será "un homenaje a las víctimas y a la marea de generosidad sin límites que vivió la ciudad".

Galicia entera ha enmudecido este mediodía con las concentraciones silenciosas que se han registrado en todos los municipios de la Comunidad Autónoma, muchos de los cuales han decidido suspender sus fiestas patronales.

Mientras tanto, y aunque pasará tiempo en olvidarse el que ya es el segundo accidente ferroviario más grave de la historia de España, "la vida continúa" y "hay que seguir viviendo", tal y como afirmaba esta mañana una de las pasajeras que ha llegado a Santiago en el primer tren Alvia que hecho el mismo trayecto (Madrid-Ferrol) que el convoy siniestrado una vez restablecido el tráfico.

"Lo que ha quedado claro, una vez más, es que España es un país tremendamente solidario que se vuelca en este tipo de tragedias", afirmaba Ana Martínez, coordinadora de los psicólogos que asisten a los familiares de las víctimas.

A la oleada de solidaridad que ha levantado el siniestro se ha referido esta tarde en Santiago el Príncipe Felipe, que ha subrayado la "espectacular reacción espontánea" de la ciudadanía y ha agradecido la labor de los servicios de emergencias, actitudes que, ha recalcado, "alimentan la fortaleza de la sociedad".

"España puede estar orgullosa de Galicia y los gallegos muy orgullosos por esto", ha señalado en la zona del siniestro, el Príncipe, quien ha añadido que espera que este reconocimiento les ayude a "sobrellevar el dolor y la tristeza" por la tragedia.

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