Incautadas en Francia 750.000 pastillas de 'la droga de los yihadistas'

Agentes del servicio de Aduanas de Francia se han incautado en el aeropuerto de Roissy, en el noreste de la región de París, de un cargamento de 750.000 pastillas de captagón, una sustancia también conocida como 'la droga de los yihadistas' porque ha sido utilizada por milicianos de grupos terroristas en Irak y en Siria.

En un comunicado, el servicio aduanero galo ha dicho que la droga estaba repartida en varios moldes industriales pesados que fueron interceptados en el aeropuerto de Roissy en enero y en febrero de este año y que llegaron procedentes de Líbano.

El cargamento comprende 750.000 pastillas de captagón en total y habría alcanzado un valor de cerca de 1,5 millones de euros en el mercado negro.

Los moldes llegaron al aeropuerto galo procedentes de Líbano y tenían como destino final República Checa. Tras las investigaciones, los agentes de Aduanas de Francia han llegado a la conclusión de que el cargamento iba a ser enviado realmente a Arabia Saudí, tras una escala en Turquía.

También conocida como 'la droga del conflicto sirio', el captagón es una droga psicoestimulante creada a finales de la década de los 50 y consumida principalmente en Oriente Próximo.

El primer cargamento de captagón fue descubierto en enero de 2017 en el aeropuerto de Roissy oculto en las paredes de un molde industrial de acero que pesaba unos 700 kilos. Tras tres horas desmontando el molde e inspeccionándolo, los agentes lograron extraer las pastillas de captagón del molde. A continuación, hicieron lo mismo con otro molde idéntico. En total, los agentes se incautaron de 350.000 pastillas con un peso total de unos 70 kilos.

Días después, el 22 de febrero de 2017, el servicio de Aduanas de Francia interceptó otro cargamento de pastillas de captagón oculto en moldes industriales de acero procedetes de Líbano y que tenían como destino final África. En total, este segundo cargamento comprendía 67 kilos de 'la droga de los yihadistas', unas 400.000 pastillas.

La droga incautada ha sido analizada en laboratorios franceses, que han determinado que era captagón compuesto por metanfetamina y teofilina. Según la BBC, el captagón ha sido utilizado como droga estimulante para perder el miedo por milicianos de grupos terroristas y de grupos rebeldes que combaten en la guerra de Siria.