Ya lo avisaron los registros civiles. Ahora el INE apunta en la misma dirección y señala que la mortalidad se ha disparado en España, al sumar el país hasta 44.000 los fallecimientos por encima de los que se esperaban para este 2020, es decir, un exceso de letalidad de un 24% respecto al año anterior. La pandemia lleva meses causando estragos, pero los registros del Instituto Nacional de Estadística marcan como la semana negra el periodo entre el 30 de abril y el 5 de marzo. En apenas siete días se registraron 20.575 fallecidos, lo que supone un 154,6% más que en el mismo intervalo de 2019.
España registró ayer su segunda jornada sin víctimas mortales de Covid. Así lo apuntan las tablas oficiales del Ministerio de Sanidad. Como ya ocurrió con el Sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo), las recientes cifras aportadas por el INE contrastan con los datos de la cartera. Según el departamento que dirige Salvador Illa, el total de decesos a causa del virus, extraído del conteo de las CCAA, la pandemia ha dejado 27.127 fallecimientos. El balance del INE habla de más del doble de muertes, por encima de lo esperado, de las que ha informado Sanidad. La institución puntualiza: "Dado que estos datos reflejan la mortalidad sin distinguir causas, no se puede medir de forma exacta el impacto de la pandemia COVID-19, pero sí se observa un considerable aumento en el número de defunciones en España".
El informe se ha presentado bajo el título 'Estimación de Defunciones Semanales durante el brote de COVID-19 (EDeS)',. Será el primero de muchos. El INE publicará su recuento los miércoles cada dos semanas. Sus datos se ofrecerán con un retraso de diez días, por tanto, en esta primera publicación se ofrecen datos hasta la semana 21 de 2020, que finalizó el domingo 24 de mayo (inclusive). Conforme se vaya disponiendo de datos provisionales de Certificado médico de defunción/Boletín estadístico de defunción, se sustituirán las estimaciones por estos datos provisionales.
Los datos, punto por punto
Los cambios más drásticos se observan al desgranar las cifras por edades. Mientras que el grupo por debajo de los 54 años apenas ha presentado diferencias respecto a las defunciones notificadas en las mismas semanas del año 2019. Es dentro de la tercera edad, colectivo de alto riesgo frente a la Covid, donde se han reflejado los aumentos más pronunciados en los decesos acumulados.
Durante las primeras 21 semanas, los mayores de 90 años han sufrido 12.824 defunciones más, un 27,2% por encima de las estadísticas del mismo periodo de 2019. El grupo de edad entre los 85 y los 89 años, los decesos se han disparado en, al menos, un 25%; con 10.006 fallecimientos más que hace un año. . Por su parte, en las edades inferiores a 54 años apenas hay diferencias respecto a las defunciones registradas en las mismas semanas del año 2019.
En cuanto al indicador por regiones, el Principado de Asturias cuenta con un aumento del 8,43% en dicha variación anual. Los mayores aumentos en esas primeras 21 semanas se han registrado en las CCAA de Madrid (72,7%), Castilla-La Mancha (58,0%) y Cataluña (41,0%). Por el contrario, los menores incrementos se observan en Baleares (0,5%) y Murcia (1,1%).
El crecimiento del número de defunciones tampoco ha sido igual en todo el periodo. De acuerdo con el informe, la semana con mayor número de defunciones fue la 14 (que comprende del 30 de marzo al 5 de abril) con 20.575 personas fallecidas, un 154,6% más que en la misma semana de 2019. Por su parte, durante las semanas 12 a 16 (desde el 16 de marzo al 19 de abril) el incremento de defunciones fue siempre superior al 50%. En la semana 21, última estudiada, el número de defunciones se estima en 7.470 personas, cifra similar al de la misma semana de 2019, cuando hubo 7.429 muertes.
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