Jmj 2011. El papa agradece a las monjas su fidelidad en un momento de "verdadero rechazo al cristianismo"


Alrededor de 1.600 jóvenes religiosas recibieron este viernes al Papa Benedicto XVI en su visita al Patio de los Reyes del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial. El Sumo Pontífice se reunió con ellas para celebrar la XXVI Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) y para agradecerles su "fidelidad", más aún en un momento en el que se percibe un "verdadero rechazo" hacia el cristianismo.
Benedicto XVI pronunció estas palabras después de que el cardenal Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid, afirmara, entre aplausos, que las monjas "son lo mejor de la juventud de la Iglesia, de la sociedad y, por supuesto, de España".
El Papa se unió a este reconocimiento al asegurar que el compromiso de estas jóvenes religiosas es especialmente relevante hoy, cuando "se constata una especie de eclipse de Dios, una cierta amnesia. Más aún, un verdadero rechazo del cristianismo y una negación del tesoro de la fe recibida, con el riesgo de perder aquello que más profundamente nos caracteriza".
Las religiosas le contestaron con un sentido discurso en el que le ofrecieron su apoyo. "Sabemos, Santo Padre, que la cruz que lleva es muy pesada, y queremos decirle que no la lleva solo, cuenta con nosotras", le dijeron.
Asimismo, manifestaron su deseo común de "ser santas". Para ello, "confiamos en la gracia de Cristo y en el magisterio de Su Santidad", concluyeron.

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