El calvario judicial de Francesco Arcuri ha llegado a su fin después de cinco años porque la Justicia italiana ha archivado todas las querellas de maltrato infantil que Juana Rivas, su expareja, interpuso en su contra. El abogado en España del denunciado, Enrique Zambrano, aseguró a 'La Información' que la decisión de la entidad italiana "era la esperada" porque "cuando no hay nada que temer solo queda esperar. Las denuncias estaban fuera de la lógica y el auto acredita su falsedad".
Las acusaciones del presunto maltrato físico de Francesco Arcuri a sus hijos se fueron sucediéndose una tras otra desde 2016 y la última fue interpuesta en el verano de 2018. El letrado Zambrano declaró que la mayor parte del trabajo legal se hizo desde Italia, pero la colaboración entre ambos equipos ha sido constante porque "había muchos agujeros que tapar". El tribunal de Caligliari resolvió que los señalamientos de Rivas "carecen de fundamento" y el defensor español resaltó que el escrito judicial describe a Arcuri como un "padre modelo". A continuación, el auto completo.
El letrado solo difiere con el punto del documento que dice que en el primer momento la intención de la mujer fue sustraer a los menores porque considera que su propósito real era "obtener la ayuda no contributiva que se le da a las mujeres maltratadas. La mujer se vio en aprietos cuando su expareja le cortó la pensión para que fuera a Italia a aclarar los hechos y decidió tomar esta medida por razones económicas. Quería una vía de ingresos y por eso tomó la decisión".
El caso no estuvo exento de presiones sociales por el fuerte empuje de las manifestaciones feministas que se posicionaron contra Arcuri. Las acusaciones eran graves y el tema delicado. El diario 'El Mundo' destapó en su momento que Dolores Delgado, la actual fiscal general del Estado, llegó a dirigirse a su homólogo italiano para interceder en favor de la granadina. Pero, Zambrano contó que al final "logramos llevarlo bien. El ser humano miente (sin importar el sexo) y el bien y el mal están presentes en su naturaleza".
Para el abogado español, lo más grave de la trama es que Rivas "maltrató psicológicamente a los niños cuando los apartó de su padre. Eso es imperdonable. El Código Penal puede tratar el caso como un maltrato, pero realmente es una mutilación. Es tan espinoso como el maltrato a la mujer. Espero que la ley Rhodes, tan publicitada por el vicepresidente actual, tenga efecto".
Juana Rivas fue condenada a cinco años de cárcel por secuestrar a sus hijos y el juez de Familia italiano la separó de ellos por ser un "peligro patológico". El tribunal de Cagliari ha resuelto el último recurso de la española al archivar todas sus denuncias por no ver pruebas suficientes para proceder. La Justicia italiana tachó de "inconsistentes" sus relatos y apuntó que la mujer utilizó a sus hijos como "escudos humanos" en el conflicto con su expareja.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios