De descuartizar a la cocaína: la confesión (parcial) del presunto asesino de Marta

  • Primero aseguró que la descuartizó y arrojó a varios contenedores y ahora que su muerte fue accidental mientras practicaban sexo con cocaína
Vivienda en Manuel donde pudo ser asesinada Marta Calvo
Vivienda en Manuel donde pudo ser asesinada Marta Calvo
EFE

Respeto y justicia. Lo pide el padre de Marta Calvo en una emotiva carta al conocer lo que el presunto asesino de su hija hizo con ella. Primero aseguró que descuartizó el cuerpo y lo arrojó a varios contenedores de Carcaixent, Manuel y Silla. Después, en presencia de su abogado, habría declarado que murió de forma accidental en lo que se denomina fiesta blanca, consumir cocaína mientras se mantienen relaciones sexuales. Los investigadores tratan ahora de reconstruir todo lo dicho por Jorge P.J., quien también aseguró que decidió deshacerse del cuerpo por miedo a sus antecedentes policiales. 

Entre gritos de "¡asesino!" salía del cuartel de la Guardia Civil de Xantivent donde el pasado miércoles llegó a las tres de la madrugada llamando a la puerta asegurando ser la persona que estaban buscando por la desaparición de Marta Calvo. Una vez dentro habría solicitado hacer una llamada a su madre y un bocadillo, según desvelaba 'Espejo Público'. Durante cinco horas estuvo prestando una declaración que los investigadores no pasan a creerse hasta que lo comprueben de forma minuciosa.  Una posible autopsia podría revelar si la forma en la que Marta pierde la vida que indica el sospechoso es real. Pero no hay cuerpo. Lo que no debería olvidar el detenido es que con la ley en la mano habría podido incurrir en los delitos de omisión de socorro, el favorecimiento al consumo de estupefacientes y el homicidio imprudente. Y no olvidemos que aunque no haya cadáver puede haber condena.

Ahora la clave está en la vivienda de Manuel que tenía alquilada a nombre de su madre y donde llegó con Marta Calvo. Esa es de las pocas certezas que hay ahora mismo sobre la mesa ya que fue la propia joven la que se puso en contacto con su madre para mandarle la ubicación del sitio donde iba a pasar la noche. Según se ha podido conocer aquel 7 de noviembre Jorge podría estar celebrando su cumpleaños. A las 05:55 horas fue el último momento en el que Marta se conectó a su móvil. Dos días tardó su madre en presentarse en esa casa y uno en poner la denuncia por desaparición ya que le abrió Jorge para asegurarle que no sabía nada de ninguna Marta.  

Esa puede ser la vivienda en la que sucedió todo. El sospechoso de la desaparición de la joven tenía alquilada otra casa, en L'Olleria, que tamibén ha sido registrada y donde se encontraron un ordenador y vario smóviles. Allí su casera ha asegurado en alguna ocasión que se trataba de una persona amable con la que incluso había desayunado junto a sus hijas un Cola Cao. Ahora se sabe que en una de las caras de su doble vida se presentaba como un buen chico que estaba acabando una carrera universitaria en una universidad privada de Valencia. Nadie conocía su pasado ni su delito con las drogas que le llevó a la cárcel en Italia.

Jorge cumplió condena en Italia por tráfico de drogas y en España ha sido detenido en numerosas ocasiones por tráfico de drogas y conducción temeraria. También fue investigado por la muerte de una prostituta en abril que murió por una sobredosis de cocaína en Rufaza (Valencia). Fue el principal sospechoso porque fue su último cliente. El caso se archivó.

Ahora la Guardia Civil tiene dos prioridades, localizar los restos mortales de Marta Calvo y comprobar in situ  si se sustenta la versión del detenido. En esa vivienda de Manuel durante las últimas semanas ya se habían acometido varios registros. El primero llegó justo después de que la madre denunciara que su hija desapareció después de estar en esa vivienda. Y son esos agentes los que se percatan del fuerte olor a lejía en una vivienda en la que si atendemos a lo declarado por Jorge Marta habría perdido la vida el mismo día siete, lo que le habría dejado tiempo de sobra para acabar con cualquier vestigio de ello en la vivida. El segundo registro en la casa, con Jorge ya desaparecido fue mucho más exhaustivo: miraron en tuberías, levantaron baldosas... lo que hiciera falta para poder encontrar una pista que acabe dando con el paradero del cuerpo de esta joven que la familia pide se la recuerde por su eterna sonrisa.

Los vecinos de su localidad valenciana de Estivella mostraban ayer su respeto a las últimas noticias conocidas con una concentración en silencio, muestra de respeto y dolor que una familia. Ayer el padre decidió enviar una emotiva carta a Espejo Público, en la que asegura  que lo peor que puede vivir un padre "es no saber donde está tu hija". También hace mención a esa llamada "que nunca esperas recibir" en el que le comunican la posibilidad de que su hija de 25 años esté muerta. "Han sido 26 días de miedo hasta recibir esa llamada que nunca hubiera querido recibir". "Vivimos desde hace casi un mes sumidos en una auténtica desesperación", empieza la emotiva carta. "26 días de incertidumbre, miedo, preocupación... con sus 26 noches, hasta recibir esa llamada". Asegura que ese periodo lo han "padecido" en familia, "arropado por mi pareja, mis padres, y mi hijo pequeño, el hermano de Marta".

Mostrar comentarios