La onu alerta de un aumento de la explotación sexual en filipinas tras el tifón

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), organismo perteneciente a Naciones Unidas, aseguró este martes tener “fuertes indicios” de que ha aumentado la trata de personas con fines de explotación sexual en Filipinas cuando se cumplen algo más de dos meses del paso del devastador tifón Haiyan, el más intenso jamás registrado en tocar tierra.
El pasado 8 de noviembre, Haiyan destruyó el centro del archipiélago filipino y afectó a 16.078.181 personas, pertenecientes a 3.424.593 familias, según el boletín informativo difundido este martes por el Gobierno de este país, al que tuvo acceso Servimedia.
Además, la catástrofe provocó la muerte de 6.201 personas, en tanto que otras 28.626 resultaron heridas y un total de 4.095.280 filipinos (de 890.895 familias) tuvieron que ser evacuados en 381 centros de refugiados.
La OIM indicó en un comunicado que la pérdida de viviendas y medios de vida obligó a decenas de miles de personas a emigrar, muchas de ellas hacia la capital filipina, Manila. “Su vulnerabilidad se ha convertido en una oportunidad para que los traficantes las engañen o coaccionen hacia situaciones de explotación”, apuntó.
En este sentido, Romina Santa Clara, delegada de la OIM en Filipinas, afirmó que la región de las Bisayas Orientales, una de las más afectadas por el tifón, “es conocida por ser una fuente de mujeres y niños con fines de explitación sexual, y hombres y niños para su explotación laboral. Esto se debe principalmente a la alta incidencia de pobreza en la región”.
"Aunque todavía no tenemos datos precisos sobre los casos de trata de personas después de Haiyan, hay fuertes indicios de que, despojados de sus bienes y medios de vida, más personas serán víctimas, a menos que se tomen inmediatamente las medidas adecuadas", apostilló.
La OIM trabaja con el Gobierno de Filipinas para responder a un riesgo creciente de la trata de personas en seis áreas “críticas”, principalmente las Bisayas Orientales. No obstante, desarrolla campañas de sensibilización con materiales informativos y educativos, y celebrará actividades para que los representantes de las comunidades y los agentes de seguridad prevengan y afronten el tráfico de personas en situaciones de emergencia.