Kinshasa, 28 jun.- La República Democrática de Congo pidió hoy a las autoridades ruandesas que dejen de alimentar la guerra en la parte oriental de su territorio, al invocar el último informe del Consejo de seguridad de la ONU que, según dijo, confirma el apoyo de Ruanda a la rebelión.
"Pedimos a Ruanda que deje de suministrar armas y efectivos a los milicianos del Movimiento 23 (M 23) y otros grupos armados presentes en el nuestro territorio", declaró el portavoz del gobierno y ministro de los Medios de Comunicación, Lambert Mende, en rueda de prensa.
Mende advirtió a Ruanda, país vecino, sobre los riesgos nefastos que su actitud pueden ocasionar por la estabilidad de la zona.
El informe recién publicado del Consejo de Seguridad de la ONU menciona implícita y directamente a algunas personalidades ruandesas, afirmó el ministro congoleño.
Lambert Mende criticó lo que tachó de "contradicciones" en el discurso del presidente ruandés, Paul Kagame, cuando afirma que el conflicto al este de la RDC es un asunto estrictamente congoleño.
Con su declaración, el presidente ruandés ha confirmado su implicación y su apoyo a los congoleños que juegan con fuego y contribuye así a la desestabilización del país, agregó Mende.
"Si la situación del este es un asunto congoleño, por qué el jefe del estado ruandés se permite inmiscuirse en ello?". se preguntó Mende.
El portavoz del gobierno congoleño subrayó la necesidad de privilegiar una solución pacífica a la crisis en el este de su país, resaltando que la paz es "la opción menos costosa, no solamente en armas o dinero, sino también en vidas humanas", dijo.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios