La Voz de Dios o cómo hacer llegar la Biblia a través del rock

Carmen T. Izquierdo

Ávila, 4 oct.- Hacer llegar el mensaje de Dios a través del rock es el objetivo de La Voz del Desierto, un grupo de música integrado por tres sacerdotes y cuatro laicos que, conocidos como "los curas rockeros", se han convertido en un fenómeno que tiene un público incondicional allá donde van.

Diez años llevan sobre el escenario los componentes de esta formación que a finales de 2013 lanzó su cuarto disco, 'Él me vuelve a levantar', ha indicado, en una entrevista concedida a Efe, Alberto Raposo, una de las guitarras eléctricas del grupo y también uno de los que no se quitan el alzacuello cuando saca su lado más rockero.

Todo comenzó en el Seminario, con la idea de formar un grupo que animara el "fin de fiesta" de los encuentros diocesanos, misas o peregrinaciones, aunque la iniciativa ha ido afianzándose con la grabación de cuatro discos y con actuaciones en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Madrid o, el más reciente, en julio de este año, en el Festival Jota, de Portugal.

El rock les sirve, ha explicado Alberto Raposo, antes de un concierto en el Encuentro Nacional de Delegados y Responsables de Pastoral de la Juventud que se celebra hasta el domingo en Ávila, para hacer llegar el mensaje del Evangelio de una forma nada tradicional, pues no se trata de hacer canciones y cantarlas en misa sino de echar mano del rock y subir a un escenario.

Con ensayos todos los domingos por la tarde, La Voz de Dios, tal como ha señalado Álex, el otro guitarra eléctrico del grupo, al final han conseguido que su música se vea como "una obra de evangelización", aunque hacerse famosos no es su objetivo.

"Los jóvenes escuchan rock y pop", ha explicado Alberto, quien ha resaltado que la música que se escucha "en la universidad o en el coche" es esa, algo que también les ha llegado a través de las redes sociales, con sugerencias que les envía su público.

Pero el rock forma parte, además, de sus gustos personales, entre los que se cuelan canciones más melódicas de los Hombres G o música clásica, pero donde Metallica, Queen o el rock de los setenta son la referencia, junto con el rock progresivo por el que se decanta el teclista del grupo, Antonio.

No es de extrañar que, a la hora de componer las canciones, este eclecticismo acabe dando como resultado temas que tienen una única "misión", como es emplear la música para transmitir "el mensaje de Dios", que "es el que queremos que sea famoso", ha añadido.

En el grupo de Whatsapp que comparten envían sus sugerencias y canciones que se transforman en temas para sus discos, aunque siempre echan mano de la Biblia y de experiencias personales para escribir letras como 'Getsemaní', 'Rut', 'Mi fortaleza', 'En clave natural' o 'Misericordia eterna'.

Hasta ahora, para sus canciones se han decantado por la palabra de Dios en vez de abordar temas "más sociales", como podrían ser la crisis económica o la recientemente desechada reforma del aborto, porque "más que reivindicativos", quieren "hacer una propuesta de alegría y esperanza", ha señalado Alberto.

A través de iTunes y en Spotify venden principalmente sus discos, mientras se preparan para participar en los conciertos que ya tienen en agenda, entre los que destacan el Encuentro Europeo de Jóvenes, que tendrá lugar en Ávila en 2015, y la Jornada Mundial de la Juventud de Cracovia, en 2016.

Mientras llegan esas fechas y con la ilusión de poder tocar ante el Papa, sobre todo si viene a España en 2015, por el V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús (1515-2015), empieza a rondarles la idea de componer de nuevo para meterse en el estudio y grabar su quinto álbum. EFE

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