Los pacifistas mantienen la marcha a Gaza a pesar de la prohibición de Egipto

Barcelona.- La treintena de activistas catalanes que se encuentran en Egipto con la intención de entrar a la franja de Gaza por el paso de Rafah aseguran que mantendrán la marcha de apoyo al pueblo palestino a pesar de la prohibición de las autoridades egipcias y de la advertencia del Gobierno español.

Los activistas forman parte de una iniciativa internacional en la que participan 1.400 pacifistas de 40 países que intentan entrar en la franja de Gaza en un acto de apoyo simbólico al pueblo palestino y en recuerdo de la ofensiva israelí que hace un año provocó miles de víctimas en este territorio.

Los miembros catalanes de la marcha se encuentran divididos en varios grupos distribuidos entre las localidades egipcias de El Cairo, Al-Arish y el paso fronterizo de Rafah, según han informado hoy a través de una videoconferencia a sus compañeros de las diferentes plataformas de apoyo a Palestina con sede en Barcelona.

Desde Al-Arish, la activista María del Mar Fernández ha afirmado que su intención es alcanzar la frontera entre Egipto y Gaza "como sea", a pesar de que las autoridades egipcias no han autorizado la marcha y que el Gobierno español les advirtió que no podrían atravesar el paso de Rafah, que permanece cerrado desde 2007 y que sólo se abre puntualmente por razones humanitarias.

Fernández ha denunciado que la policía egipcia ha interceptado a numerosos activistas que se encontraban camino de Rafah y los ha devuelto a El Cairo, confinándoles en sus hoteles e impidiéndoles reunirse y comunicarse entre ellos vía telefónica.

Como forma de protesta por la actitud de las autoridades egipcias un grupo de cinco activistas, entre los que se encuentra la catalana Teresa Sala, mantienen desde ayer una huelga de hambre en El Cairo junto a la superviviente del holocausto judío Hedy Epstein, de 85 años.

Sala ha informado, mediante conexión telefónica, que la policía egipcia les ha retirado las mantas con las que se protegían del frío y les impide acceder a los lavabos pero que negocian con autoridades del país poder llegar al menos hasta el paso fronterizo de Rafah para "que el pueblo palestino sepa que les apoyamos".

Fernández ha asegurado sentirse "muy decepcionada" con la embajada española en Egipto a quien ha acusado de ser una "prolongación del gobierno egipcio" porque, según ella, no han mostrado ningún interés por la situación de los pacifistas.