Los trabajadores griegos secundan una huelga contra el recorte del gasto público

  • Atenas.- La vida pública se paralizó parcialmente hoy en Grecia, donde de miles de trabajadores de varios sectores, como la construcción, puertos, turismo y periodismo, realizaron una huelga en protesta contra el anunciado recorte del gasto público.

Atenas.- La vida pública se paralizó parcialmente hoy en Grecia, donde de miles de trabajadores de varios sectores, como la construcción, puertos, turismo y periodismo, realizaron una huelga en protesta contra el anunciado recorte del gasto público.

Un 60 por ciento de los trabajadores convocados por el sindicato comunista PAME participaron en el paro laboral, informó a Efe un portavoz sindical.

"Protestamos contra las medidas que traerán pobreza, reducción de sueldos y hambre a la clase obrera", declaró Jristos Hatsiotis, durante una de las tres manifestaciones en el centro de Atenas.

"El capital es responsable de la situación actual del país y los ricos son los que deben pagar, no nosotros", añadió el sindicalista.

Los sindicatos mayoritarios no han querido participar en la huelga de hoy, la primera de importancia tras los anuncios del nuevo gobierno socialista de ahorro y ajuste para combatir la elevada deuda pública y el déficit presupuestario.

La huelga de los periodistas impedirá que mañana haya diarios, mientras que hoy no se emiten noticieros en las radios y televisiones.

Grecia vio reducida su calificación de deuda soberana hasta BBB+ por dos de las tres grandes agencias de calificación de riesgos, lo que ha causado temor en los mercados financieros sobre la solvencia del país helénico, que es miembro de la zona euro.

La Confederación de Trabajadores (Gsee) y la Asociación de Funcionarios Públicos (Adedy) han dado una tregua al nuevo ejecutivo socialista hasta enero de 2010, para cuando se espera la presentación en el Parlamento griego y ante la Comisión Europea del Plan de Estabilidad y Desarrollo.

La deuda pública de Grecia alcanza actualmente los 300.000 millones de euros, un 113 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), mientras que el déficit público será este año del 12,7%.

El primer ministro, Giorgios Papandreu, anunció el lunes pasado que recortará el gasto social en un 10 por ciento, además de combatir la endémica corrupción y evasión impositiva.

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