Cunit (Tarragona).- Los votos De PSC -con siete concejales- y PP -con dos-, que gobiernan el consistorio de Cunit, han permitido aprobar hoy en un pleno extraordinario una moción conjunta de ambas fuerzas políticas por la que se prohíbe el uso del burka y el niqab en los edificios municipales.
La concejal socialista de Políticas de Igualdad e Inmigración, Silvia Martínez, que en los últimos días había asegurado que se abstendría porque creía que no tenía sentido legislar sobre este asunto, ha dado hoy un giro de 180 grados, se ha desdicho, ha votado a favor y ha pedido perdón al PSC por sus anteriores declaraciones.
Un agitado y largo debate previo ha precedido la votación de la moción, que ha sido aprobada con 9 votos a favor (PSC y PP) y ocho abstenciones de CiU (6), ERC (1) e ICV (1).
La moción aprobada acuerda "prohibir el uso del burka y el niqab en los edificios municipales para exigir la identificación total de las personas", lo que atañe también a cualquier tipo de vestimenta que cubra la cara, así como instar a la Mesa de Diversidad de Cunit que siga trabajando en la sensibilización y coeducación necesarias para erradicar cualquier discriminación de género en la sociedad".
Por último, la moción insta al Gobierno y al ejecutivo catalán a que establezcan un marco común de regulación de la identificación del rostro en las dependencias de organismos oficiales para homogeneizar los reglamentos existentes.
En su explicación de motivos previa a la votación, la alcaldesa, Judith Alberich (PSC), la senadora que levantó la liebre del asunto al proponer llevarlo a la Cámara Alta, por lo que fue desautorizada por el presidente catalán, José Montilla, ha señalado que el único objetivo de la moción era "la igualdad efectiva" entre sexos.
A su juicio, algunas de las culturas que conviven en el país perpetúan "actitudes machistas y patriarcales".
Alberich, que gobierna una localidad con más de 12.000 ciudadanos de 60 nacionalidades diferentes, se ha congratulado por que "siete asociaciones catalanas islámicas hayan reconocido que el velo integral dificulta la convivencia", y ha apuntado que esta moción es diferente a otras porque apuesta "por el diálogo y el consenso".
Por su parte, el portavoz de ERC en Cunit, Ivan Faccia, se ha mostrado "a favor de la democracia a cara descubierta", y se ha referido al caso de Fátima, la única musulmana conocida que utiliza el niqab en Cunit -no hay casos de burka-, para explicar "los burkas culturales que llevan los nuevos catalanes".
"No todas las civilizaciones tienen la misma idea de la mujer y este no es un debate sobre la igualdad, sino sobre qué modelo de inmigración tenemos", ha dicho Faccia, que ha sido aplaudido por el público asistente al pleno, mientras que el portavoz de ICV, Toni Martínez, ha asegurado que con esta moción se pretendía "desviar la atención" sobre los problemas reales de Cunit, como su altísimo endeudamiento, que casi impide pagar las nóminas.
Martínez le ha preguntado a la alcaldesa por qué no ha hablado con la vecina que lleva niqab "antes de legislar", y el portavoz del PP, Pepe Barquier, ha indicado que es un tema "de seguridad" y que hay más mujeres en estos casos, aunque ni salen de casa "ni tienen derecho a un ginecólogo".
La portavoz de CiU, Montse Carreras, ha asegurado que la prohibición "no solucionará el problema real" y ha aconsejado a la alcaldesa que mire los problemas "a la cara, en vez de generarlos".
Tras los motivos, Alberich ha cedido la palabra a la concejal Silvia Martínez, que ha leído un comunicado en el que se retracta de sus palabras anteriores, cuando dijo que se abstendría porque era "un absurdo" prohibir el burka", y culpó al PSC de "perder los papeles" en este asunto".
Hoy, Martínez ha celebrado el acuerdo PSC-PP para presentar una moción conjunta porque supone "sumar esfuerzos", y ha dicho que votaría a favor porque no le gustaba el primer punto de la moción, pero sí los restantes, y sobre todo por el cambio producido: "el consenso".
Martínez, responsable de Inmigración, no ha querido contestar preguntas de los periodistas en un receso del pleno, y ha sido sacada en volantas de la sala por sus compañeros de partido, no sin antes declarar que se "alegraba" por formar parte de un partido "abierto al debate y al diálogo", al que pedía "disculpas" por si había ofendido a alguien con sus manifestaciones anteriores.
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