México, 19 abr.- El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva pidió hoy al mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto, que "no les falte" a los mexicanos más pobres, 7,5 millones que carecen de lo básico para comer, y que aplique políticas efectivas contra el hambre.
"Este país es extraordinario, que tiene una historia extraordinaria, que ya albergó la civilización más importante del mundo, tiene todo lo que el pueblo necesita. Así que ahora ellos lo tienen a usted. No les falte", dijo Lula.
En un acto celebrado durante una visita a la comunidad de Navenchauc, en el municipio de Zinacantán, en el estado suroriental de Chiapas, Peña Nieto y Lula explicaron detalles sobre la Cruzada Nacional contra el Hambre impulsada en México.
Este programa, que es similar en su confección al "Fome Zero" (Hambre Cero) creado por Lula en Brasil en 2003, busca abatir las carencias alimentarias en México y dar mayores oportunidades a los más pobres.
Lula explicó que "sí se puede erradicar el hambre en el mundo", lo que le valió un aplauso de los indígenas tzotziles que acudieron al acto, y detalló que son los pobres los que necesitan de los Gobiernos, no la gente rica.
Detalló que en Brasil, en diez años, las iniciativas sociales que impulsó permitieron que 33 millones de personas dejaran la pobreza y que 40 millones más pasaran a engrosar la clase media.
Lula dijo que en su mandato logró generar 19 millones de empleos formales, elevar el salario mínimo de 80 a 350 dólares, y fomentar el crédito y la bancarización de los más desfavorecidos.
El exsindicalista y expresidente de Brasil (2003-2010) recordó que "el único patrimonio que tienen (los pobres) es su nombre y su honor", pero que son personas dignas de crédito en quienes se debe confiar.
Apuntó que el hambre no es un problema derivado de la falta de dinero, de producción agrícola o de tecnología, sino que existe "por falta de vergüenza de los gobernantes en el mundo que no se preocupan por el pueblo pobre".
Recordó que en los últimos años se han gastado cantidades exorbitantes en conflictos armados como la guerra de Irak, 1,7 billones de dólares, y 9 billones más "para salvar al sistema financiero" de la crisis internacional vigente, esfuerzos económicos que podrían haber permitido ayudar a millones de personas en pobreza extrema.
Antes del acto. los mandatarios recorrieron la comunidad tzotzil y recibieron de las autoridades indígenas el bastón de mando, vestidos zinacantecos con brocados y collares de flores, con los que se presentaron ante la audiencia.
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