Madrid. Intercambio de insultos y acusaciones entre el alcalde de robledo de chavela y los agentes forestales de la comunidad

El alcalde de Robledo de Chavela, Mario de la Fuente y los agentes forestales de la Comunidad de Madrid están en pie de guerra y se intercambian acusaciones e insultos por el incendio que asoló esta semana la sierra Oeste madrileña.
De la Fuente, según informa la Asociación Profesional de Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid (ApafMadrid), les ha acusado públicamente de "no permitir hacer cortafuegos", del agravamiento del incendio por este motivo, de ser unos "cantamañanas", de hacer "estupideces" y de "pintar la mona".
Los agentes forestales, por su parte, han recordado al regidor de Robledo que "cada uno de los agentes forestales han superado la considerada como más dura
oposición del grupo C, con pruebas físicas, casos prácticos y teóricos sobre un extenso temario de legislación, flora, fauna, montes, incendios, aguas, plagas, espacios protegidos, etc. Reciben formación y entrenamiento periódico sobre todos estos temas y
pasan su vida laboral en el monte", mientras que "la profesión del señor de la Fuente es la de panadero y el hecho circunstancial de que en la actualidad sea alcalde, no le capacita ni como experto gestor forestal ni como especialista en incendios ni como ingeniero de montes, ni mucho menos como lanzador de improperios y exabruptos para dar rienda suelta a su ignorancia y venganzas personales".
Los agentes recuerdan que hace ocho años fueron expulsados del pueblo "por este alcalde como venganza a una denuncia de éstos al Ayuntamiento, por efectuar vertidos a un arroyo".
Además, le dicen al alcalde que si "quiere hacer cortafuegos en los montes de propiedad municipal, no tiene más que solicitar los permisos correspondientes al órgano competente de la Comunidad de Madrid y serán los gestores de los montes y la legislación vigente, los que determinen la viabilidad de la autorización y sus condiciones, cuestión que no depende de los agentes forestales que sólo se limitan a supervisar el cumplimiento de la ley y de lo que está autorizado, además de otras muchas funciones, entre ellas jugarse la vida junto a las llamas, por lo que son los primeros interesados en que el monte esté en las mejores condiciones posibles".
Por todo esto, los agentes forestales instan al alcalde de Robledo a que "rectifique públicamente sus palabras y a que en la medida de lo posible repare el daño causado al Cuerpo de Agentes Forestales".