"Nacemos solos y morimos solos, y en el paréntesis, la soledad es tan grande, que necesitamos compartir la vida para olvidarla". Con esta frase de Erich Fromm arranca el informe 'La soledad en España', elaborado por la Fundación AXA y la Fundación Once.
Sus conclusiones son devastadoras: la mitad de la población española admite haber sentido, en algún momento, cierta sensación de soledad durante el último año. Y casi uno de cada diez, es decir, cuatro millones de personas, asegura haberse sentido solo con mucha frecuencia en ese mismo periodo.
El estudio se centra especialmente en distinguir qué significa soledad y qué significa el aislamiento social, esto es, según sus palabras: "desmontar la asociación entre vivir solo y vivir aislado socialmente".El 20% de los adultos viven solos
Tomando como referencia las cifras que manejan las fundaciones: en torno a un 20% de los españoles mayores de edad viven solos. De este porcentaje, un 59% afirma hacerlo por voluntad propia y un 41% admite que es porque no le queda otro remedio.
Por tanto, hay un 7,9% de la población española mayor de 18 años que se puede considerar aislado, porque vive solo por obligación y no por voluntad. Ahí está la diferencia para estos organismos.
No solo eso, más del 80% de los que viven solos por obligación asegura "haber experimentado un cierto sentimiento de soledad de forma más o menos habitual", un porcentaje que se reduce al 60% entre los que viven solos voluntariamente y un 50% entre los que viven acompañados.Influencia de las nuevas tecnologías
La soledad es cada vez menos dependiente de que se viva solo o no, pues incluso los que viven solos contra su voluntad tienen toda clase de posibilidades para interaccionar y relacionarse con otras personas a través de los medios que ofrecen las nuevas tecnologías", asegura el profesor Juan Díez Nicolás, responsable del estudio.
Independientemente de la situación en la que se viva, son la noche y la enfermedad las circunstancias en las que el sentimiento de soledad más se eleva. Además, este informe incide en el hecho de que en que "el contexto social influye en la soledad". Y cita especialmente a "los avances tecnológicos, que hacen la comunicación más sencilla pero también menos intensa y menos profunda".
Es más, estas nuevas tecnologías "han cambiado el concepto de soledad". "El uso de las redes sociales no siempre se relaciona con una elevado índice de sociabilidad sino que también es propio de las personas que más sienten la soledad. Sentirse solo es uno de los problemas más relevantes en la actualidad", asegura Díez Nicolás.Personas con discapacidad
Por otro lado, el porcentaje de personas con algún tipo de discapacidad que vive sola es similar al de aquellos que no tienen ninguna, en torno al 20%. Sin embargo, la incidencia de la soledad es mucho mayor.
El informe sugiere como causa de esta diferencia "el diferente patrón de convivencia que se detecta en las personas con discapacidad". Así, en el conjunto de la población española, "el 77% de los que viven en compañía lo hacen acompañados de sus parejas o sus hijos" y sólo "un 23% por personas con las que mantienen otros tipo de relación" y, en el caso de personas con discapacidad, "el 58% viven con sus parejas o hijos y el 42% con personas con las que guardan otro tipo de relación".
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