Moreno Alonso dice que la España moderna surgió en 1808 en Sevilla

Sevilla.- El historiador Manuel Moreno Alonso data el nacimiento de la España moderna en Sevilla, en el periodo que transcurre de 1808 a 1810, cuando esa capital albergó la Junta Central.

En "El nacimiento de una nación", Moreno Alonso recuerda que "los orígenes de la España actual se han vinculado con las Cortes de Cádiz, a partir de septiembre de 1810, cuando la realidad fue bien distinta".

"Todo -sostiene- surgió dos años antes, en un proceso dirigido en su mayor parte por el Gobierno de la Junta Central", que estuvo en Sevilla de diciembre de 1808 a enero de 1810.

Profesor de la Universidad de Sevilla, especialista en la España napoleónica, la Ilustración y el liberalismo español, Moreno Alonso, autor de libros sobre Blanco White, José Bonaparte, y el exilio liberal, expone sus conclusiones en su recién publicado libro "El nacimiento de una nación", un volumen de casi seiscientas páginas editado por Cátedra.

Para el historiador, 1808 equivale "a lo que, para los Estados Unidos, fue el inicio de la revolución americana o, para Francia, el comienzo de su famosa Revolución", ya que puede hablarse -como así hicieron los coetáneos de este momento- de una "Revolución española", propiciada por la Guerra de la Independencia y las Cortes de Cádiz.

La actuación contra la invasión napoleónica y "la necesidad de reunir tales fuerzas fue el crisol en el que se forjó la unidad nacional, que pilotó militar y políticamente la Junta Central desde Sevilla, entre 1808 y 1810", según Moreno Alonso, quien define la la batalla de Bailén como "el Valmy de la nación española".

El hecho de que la mayor parte de las investigaciones históricas se hayan centrado en las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812, ha supuesto "en la práctica el desconocimiento total de los años anteriores, a pesar de que fue ese tiempo corto cuando, verdaderamente, surgió la nación española", insiste el historiador en su texto.

"El hecho, que en sí mismo constituye toda una gesta prodigiosa con ribetes épicos poco frecuentes, es tan destacado que sorprende que no se haya tenido en cuenta a pesar de su trascendencia", apunta Moreno Alonso, para quien "tan sólo el historiador norteamericano Gabriel H. Lovett pareció detectar el fenómeno en su libro 'La Guerra de la Independencia y el nacimiento de la España contemporánea'".

Lovett, en esa obra se refirió al "despertar de una nación" antes de que se celebraran las Cortes de Cádiz, y señaló: "En la Historia de la humanidad ha habido muchos casos de naciones que luchaban por preservar su independencia, pero ha habido pocos ejemplos de un levantamiento de tal magnitud".

No sin cierta ironía, Moreno Alonso aclara que con este libro no pretende "complicar aún más, sino más bien aclarar" el momento en el que, a consecuencia de la lucha contra los extranjeros, nació una nación en "plena tragedia bélica".

En el caso de España, no fue la Ilustración sino "un acontecimiento de otra naturaleza, la Guerra de la Independencia, sobre todo en su primera fase, caracterizada por su mayor carga patriótica, entre 1808 y 1810, el que provocó el sentimiento de comunidad nacional", apuntado por los intelectuales ilustrados, precisa.

Moreno Alonso matiza en sus conclusiones que "la resistencia popular prefirió más bien la voz 'patria' a la voz 'nación'", asunto sobre el que, con los textos sobre la mesa, considera los historiadores de los conceptos pueden debatir, máxime si se tiene en cuenta la complejidad del concepto "nación"', sobre el que solamente en los últimos años han corrido "ríos de tinta".