Mueren dos policías en el aniversario de las masivas protestas contra Mursi

  • Egipto recibió el primer aniversario de las protestas masivas que precedieron al golpe contra el presidente Mohamed Mursi, con la muerte hoy de dos agentes en varias explosiones frente al Palacio Presidencial de Al Itihadiya, en El Cairo.

Mohamed Siali

El Cairo, 30 jun.- Egipto recibió el primer aniversario de las protestas masivas que precedieron al golpe contra el presidente Mohamed Mursi, con la muerte hoy de dos agentes en varias explosiones frente al Palacio Presidencial de Al Itihadiya, en El Cairo.

Cientos de miles de personas salieron a las calles ese día de 2013 para exigir elecciones presidenciales anticipadas y la renuncia de Mursi, quien finalmente abandonó la Presidencia por la fuerza cuatro días después.

El nuevo presidente y ex jefe del Ejército, Abdelfatah al Sisi, que asumió el poder tras arrasar en las pasadas elecciones, fue la cara visible de la destitución de Mursi, lo que le granjeó amplios apoyos entre la parte de la población contraria a los islamistas.

Sin embargo, la simbólica jornada estuvo dominada por la muerte de dos artificieros, uno de ellos con rango de coronel, de la Administración General de la Protección Civil, cerca del Palacio Presidencial, donde otros trece policías resultaron heridos.

Las explosiones, reivindicadas por el grupo terrorista Agnad Masr (los Soldados de Egipto), se registraron cuando los agentes estaban intentando desactivar las bombas.

Según pudo constatar Efe, las bombas estaban colocadas en una zona verde adyacente al muro exterior del palacio, que fue rodeado por diferentes cuerpos de seguridad.

"Quieren asustar al pueblo para que no celebre el aniversario de su revolución, pero yo no tengo miedo", dijo a Efe Mamduh Hasán, un ciudadano de 52 años que se encontraba en el lugar.

Otro ciudadano presente, Mohamed Abdelhani, pidió que se aceleren y endurezcan los juicios contra los islamistas detenidos y que se condene a muerte a los implicados en casos de terrorismo.

Al Sisi precisó en una alocución televisada con motivo del aniversario que la vida de los agentes que perecieron hoy "no será en vano" y se comprometió a perseguir a los autores del atentado y a endurecer las leyes antiterroristas.

Por otra parte, la Policía cerró la céntrica plaza cairota de Tahrir para garantizar la seguridad de una celebración popular con motivo de aniversario del derrocamiento de Mursi, que tendrá lugar el próximo día 3 de julio.

Vehículos militares se concentran en las principales calles que conducen a la plaza, que ha sido cerrada con barricadas y alambradas, mientras decenas de unidades de las fuerzas antidisturbios de la Seguridad Central se han desplegado en los alrededores.

Los atentados terroristas, perpetrados especialmente contra el Ejército y los servicios de seguridad, han caracterizado este último año, además de las protestas de los seguidores de Mursi para pedir su restitución, que han disminuido progresivamente por la acción represora del Estado.

Tras su destitución, el Ejército y gran parte de la escena política lanzaron un proceso de transición que condujo a la redacción de una nueva Constitución y la celebración de las elecciones presidenciales.

Estos comicios, celebrados a finales del pasado mayo, dieron una victoria aplastante a Al Sisi.

En paralelo a los pasos políticos, cientos de seguidores de Mursi fueron asesinados durante el desalojo de los protestas islamistas el pasado agosto, y miles de ellos han sido arrestados y juzgados.

Hoy mismo, la Alianza para la Defensa de la Legitimidad, encabezada por los proscritos Hermanos Musulmanes, convocó "una jornada de ira" para el próximo jueves, que coincide con el aniversario del golpe, para "poner fin" al actual sistema político en Egipto, según un comunicado del grupo.

La coalición precisó en la nota que las protestas se celebrarán en las plazas céntricas de las principales ciudades: en El Cairo saldrán de 35 mezquitas y se dirigirán a la famosa plaza Tahrir y a los ministerios de Interior y de Defensa y frente a la sede del Club de Jueces.

La alianza instó a los participantes a respetar el carácter pacífico de las protestas, aunque consideró que "la defensa propia es un derecho legitimo".

Mostrar comentarios