"Si los responsables de Boko Haram aceptan devolvernos las chicas de Chibok, todas ellas, podríamos decidir conceder la amnistía" a sus prisioneros, dijo el presidente de Nigeria, Muhamadu Buhari, en una entrevista a la AFP durante su último día de visita en Francia.
"Tratamos de ver si podemos negociar con ellos la liberación de las jóvenes de Chibok. Pero somos muy prudentes: no vamos a liberar a nadie si no estamos seguros de que se encuentran en buen estado de salud", agregó.
"Mantendremos nuestros prisioneros hasta estar seguros de la cantidad de muchachas que podemos recuperar", afirmó Buhari.
Los militantes islamistas de Boko Haram habían irrumpido el 14 de abril de 2014 en el liceo de Chibok, en el estado de Borno, cuna del movimiento, donde había 276 adolescentes.
Los islamistas secuestraron a 219 y 57 lograron escapar.
Un mes después del secuestro, un video mostraba a varias decenas de las adolescentes, vestidas de negro y recitando resignadas el Corán.
El líder de Boko Haram, Abubakar Shekau, anunciaba en ese vídeo que las jóvenes habían sido convertidas al islam y "casadas" con militantes del movimiento islamista.
Según organizaciones de derechos humanos, las jóvenes son sometidas al grupo y a veces vendidas como esclavas a militantes o utilizadas como "bombas humanas" en atentados.
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