Según han informado a Europa Press fuentes del hospital puertorrealeño, este equipo, compuesto por personal facultativo y de enfermería, además de la asistencia a domicilio, con un total de 832 visitas, llevó a cabo alrededor de 128 llamadas telefónicas, como labor de seguimiento a los pacientes y sus familias.
En ellas se ofrecieron consejos terapéuticos en el abordaje de estos pacientes ante nuevos síntomas, y dudas que puedan surgir en el día a día del enfermo en esta etapa final de la vida. Estos profesionales también desarrollan labores de asesoramiento y apoyo a pacientes ingresados en el hospital, así como a residencias de ancianos y otras instituciones de la red socio-sanitaria.
El 50 por ciento de los pacientes atendidos han fallecido en su domicilio, rodeados de sus familias y seres queridos, aportando "un trato más humanizado y digno al proceso de la muerte".
En línea con la normativa de la Ley andaluza de Derechos y Dignidad de las Personas ante el Proceso de la Muerte, el Plan de Cuidados Paliativos de la Consejería de Salud persigue "aliviar el sufrimiento, aportar dignidad y favorecer el apoyo psicoemocional y social que cada persona necesite en función de sus necesidades".
Finalmente, las citadas fuentes han indicado que las estimaciones apuntan que la población susceptible de recibir cuidados paliativos en Andalucía oscila entre un mínimo de 30.000 y un máximo de 60.000 personas.
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