Premian a campesino mexicano por su lucha a favor de los derechos humanos

  • Lucas Benítez, un campesino mexicano que organizó a sus compañeros para luchar por mejores condiciones de trabajo en los campos de Immokalee, Florida, recibió hoy un premio por parte del Consejo para la Defensa de Recursos Naturales (NRDC).

Iván Mejía

Los Ángeles (EE.UU.), 16 may.- Lucas Benítez, un campesino mexicano que organizó a sus compañeros para luchar por mejores condiciones de trabajo en los campos de Immokalee, Florida, recibió hoy un premio por parte del Consejo para la Defensa de Recursos Naturales (NRDC).

"En la Coalición de Trabajadores de Immokalee (CIW) nos sentimos orgullosos que a través de mi persona la NRDC nos entregue el premio Cultivos Verdes en la categoría de Comida Justa", dijo a Efe Benítez desde San Francisco, California, donde recibió el reconocimiento.

"La NRDC entrega estos premios desde hace cuatro años; pero hoy es la primera vez que incluye la categoría por Comida Justa que consiste en producir los alimentos en campos donde se respeten los derechos humanos y del medio ambiente", agregó.

Nacido el 23 de noviembre de 1975 en Guerrero, México, Benítez llegó a Immokalee en 1992 en busca de trabajo en fincas debido a que, según dijo, en su pueblo natal el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA) generó que bajara la producción agrícola y por ello las familias campesinas se quedaron sin empleo.

"Cuando yo llegué a trabajar a la industria agrícola en los campos de tomates en Immokalee experimenté, junto a mis compañeros, una gran falta de respeto por parte de los patrones y supervisores", recordó Benítez.

"Con todas las formas de intimidación en el trabajo me di cuenta que se genera un ambiente de temor, de miedo, había patrones que incluso dejaban ver la pistola fuera de la camisa para intimidar, para que uno no dijera nada", aseguró.

Benítez agregó que a ello se sumaba que en ocasiones por escabullirse del surco por un minuto para ir a tomar agua además de las agresiones con palabras soeces recibía agresiones físicas.

"El robo de salarios era tremendo, por ello un día, a finales de 1992, decidimos organizarnos mexicanos, centroamericanos y haitianos para exigir nuestros derechos y en 1995 hicimos la primera huelga general de más de 3.000 trabajadores, por una semana", recordó.

"Con ello logramos acaparar la atención del país y expusimos lo que estaba pasando en las zonas agrícolas de Florida y así nos fuimos dando cuenta de que en esos campos el perfil de la comunidad estaba cambiando, porque éramos bastantes los que no estábamos dispuestos a seguirles aguantando", aseguró.

Benítez indicó que con diversas jornadas de protesta lograron sentarse a negociar con los jefes de la industria agrícola y por ello acordaron reducir "el robo de los salarios hasta en un 90 por ciento", la cubeta de tomate cortados de 30 centavos base a 40 ó 45 centavos y que los patrones aceptaran un nuevo código de conducta creado por los trabajadores, entre otros logros.

"Pero eso significó negociar también con los principales compradores del tomate, como Taco Bell, McDonalds y Burger King, entre otros, porque si ellos se cierran a que quieren el tomate barato la industria para sacar su ganancia lo que hace es pagarnos menos a los trabajadores", afirmó Benítez.

Benítez recibió hoy el galardón Cultivos Verdes por Comida Justa, que incluye 2.500 dólares, junto a su compañero Asbed Greg, otro fundador de la CIW, en el Palacio de la Rotonda de Bellas Artes en San Francisco.

Linda Escalante, representante de La Onda Verde de NRDC, dijo a Efe que Benítez "es un hombre trabajador, resistente que es como un héroe de la gente".

Mostrar comentarios