Un preso del centro de inserción social (CIS) de la prisión de Topas en Salamanca aprovechó la apertura de celdas de las cinco de la tarde del pasado martes para huir saltando el muro del centro en el que se encuentra interno en segundo grado flexibilizado con permiso para salir y asistir a un programa de drogodependencia.
Esa misma mañana este reo salió del CIS para acudir al curso y después regresó al centro. Fue a las cinco de la tarde cuando quebrantó la confianza y saltó el muro. Pero lejos de escapar, fue su hermana la que media hora después llamó al centro para avisar de que el preso estaba en casa y que estaba arrepentido y con intención de volver, como hace al día siguiente por la mañana.
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