Reclaman protocolos para que los drones ayuden a prevenir incendios forestales

Los ingenieros de montes y fabricantes de drones reclamaron este lunes que la legislación española incluya protocolos específicos para que los drones (vehículos aéreos no tripulados) ayuden a prevenir incendios forestales en las sucesivas campañas que pongan en marcha las administraciones públicas para evitar que el fuego arrase los montes.
El decano del Colegio de Ingenieros de Montes, Carlos del Álamo, explicó a los periodistas en un encuentro informativo en Madrid que el uso de los drones para la lucha contra el fuego es “muy útil” en la puesta en marcha de medios terrestres y aéreos para combatir los incendios.
Del Álamo destacó que las estadísticas de incendios forestales en lo que va de 2015 son “mejores que las del año pasado, que ya eran buenas”, y destacó que “nadie sabe lo que va a pasar” este verano porque “todos los incendios son iguales, pero la causa, la propagación y el entorno son distintos”, además de que cerca del 95% de las llamas se provocan por el factor humano.
José Luis Ayala, director de Proyectos y Operaciones de EagleVision, explicó que los drones son “plataformas muy útiles” en los casos de posibles incendios y de control de la extinción de las llamas, ya que captan diferentes temperaturas sobre un área concreta y pueden detectar dónde se pueden producir.
Ayala señaló que la legislación actual limita la actuación de los drones para uso civil a una altura máxima de 120 metros y una distancia visual al alcance del piloto que no supere los 500 metros, cuando estos aparatos pueden desplazarse hasta 14 kilómetros. “Podemos controlar el incendio y, cuando se ha apagado, volver a subir los equipos para ver dónde se puede reactivar”, añadió.
VUELOS DURANTE UNA HORA
Carlos Dominique, de Aerogenix, recalcó que los drones incorporan una cámara de luz visible y otra térmica que permiten realizar un seguimiento a tiempo real durante una hora con imágenes de la zona rastreada, ya que, además, pueden hacer un barrido automático del lugar.
Dominique apuntó que cada equipo puede trabajar incluso de noche y llegar a costar hasta 60.000 euros, ante lo cual Ayala comentó que son hasta cinco o seis veces más baratos que el alquiler o compra y mantenimiento de un helicóptero convencional para extinción de incendios.
“Cada vez que vamos a una reunión salen nuevas aplicaciones. Las aplicaciones serán más útiles, pero las plataformas tienen que ser muy seguras, e implican protocolos estrictos que todavía no existen para que sean una herramienta de apoyo”, apuntó Ayala.