Referentes de la sociedad vasca despiden a Basterretxea en un funeral civil

  • Una amplía representación de la sociedad vasca, fundamentalmente de los ámbitos de la cultura y la política, ha despedido hoy al escultor Néstor Basterretxea, uno de los principales referentes culturales de Euskadi en el siglo XX, en una ceremonia civil celebrada en San Sebastián.

San Sebastián, 14 jul.- Una amplía representación de la sociedad vasca, fundamentalmente de los ámbitos de la cultura y la política, ha despedido hoy al escultor Néstor Basterretxea, uno de los principales referentes culturales de Euskadi en el siglo XX, en una ceremonia civil celebrada en San Sebastián.

La iglesia desacralizada de Zorroaga ha servido de solemne escenario para un acto en el que los familiares y amigos del artista fallecido el pasado sábado en Hondarribia (Guipúzcoa) a los 90 años han glosado su figura, mientras que artistas lo han recordado con actuaciones de música, danza y bertsos.

Los primeros bancos de la iglesia han sido ocupados por su familia y amigos, ya que no se ha tratado de un acto institucional, a pesar de que han acudido las máximas autoridades vascas, encabezadas por el lehendakari, Iñigo Urkullu, y el diputado general de Guipúzcoa, Martín Garitano.

A ellos se han sumado otros dos exlehendakaris, Juan José Ibarretxe y Carlos Garaikoetxea, así como la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria, la de las Juntas Generales de Guipúzcoa, Lohitzune Txarola, o el secretario general de Eusko Alkartasuna -partido en el que militó el escultor- Peio Urizar, entre muchos otros.

Al funeral civil han asistido asimismo personalidades de la cultura vasca como el escultor Ricardo Ugarte; el cantante Gontzal Mendibil; el chef Juan Mari Arzak o el histórico portero del Athletic de Bilbao y de la selección española José Ángel Iribar.

El funeral se ha abierto con un baile a cargo del dantzari Jon Maia y ha contado con varias actuaciones, como la del bertsolari Andoni Egaña, entre los que se han entrelazado lecturas de textos y poemas, como el que ha ofrecido el escritor J.A. Irigaray, y testimonios de familiares y allegados del artista.

Como telón de fondo, imágenes de las obras de Basterretxea se proyectaban en una gran pantalla que presidía el templo, en el que los cientos de asistentes han seguido el acto en respetuoso silencio, roto en una ovación tras el emotivo testimonio de uno de los nietos del escultor.

Un coro de Bermeo, su localidad natal, ha ofrecido su último homenaje al artista, interpretando un sentido "Agur Jaunak" que todos los presenten han escuchado puestos en pie.

Los restos mortales de Néstor Basterretxea han sido incinerados hoy en la intimidad y su deseo era que sus cenizas fueran esparcidas en los dos lugares que marcaron su trayectoria: su Bermeo natal y el monte Jaizkibel, en Hondarribia, la población guipuzcoana en la que vivió y murió.

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