Un vacío legal ampara esta práctica

La reventa de entradas se dispara por el efecto Coldplay y el 'boom' de festivales

A los cinco minutos de iniciarse la venta de entradas, algunas de estas ya estaban colgadas en webs de reventa al triple de su precio original. Ticketeras y promotoras españolas implantan alternativas.  

12 August 2022, United Kingdom, London: Chris Martin, the lead singer of Coldplay, performs on stage at Wembley Stadium in north London during the "Music of the Spheres" tour. Photo: Suzan Moore/PA Wire/dpa 12/8/2022 ONLY FOR USE IN SPAIN
La reventa de entradas se dispara por el efecto Coldplay y el 'boom' de festivales
DPA vía Europa Press

Primero fueron dos, luego un tercero y finalmente serán cuatro los conciertos que la banda británica Coldplay ofrecerá el próximo mayo de 2023 en Barcelona. La enorme demanda de fans que saturaron la venta de entradas obligaron a duplicar los conciertos que estaban previstos en el Estadio Olímpico situado en Montjuïc. Ante el ritmo que llevaba la preventa, que arrancó el miércoles 24 de agosto, la promotora del evento Live Nation no tuvo más remedio que abrir una tercera fecha, ya que apenas quedaban entradas disponibles para la venta general, que tuvo lugar el día siguiente a partir de las 10 horas. Ésta llegó a acumular más de medio millón de personas en la cola virtual, mecanismo usado por la ticketera Ticketmaster para regular el proceso de venta que amenazaba con colapsar su portal web. 

Ante tal acogida, los organizadores optaron por añadir un cuarto y último concierto en el Lluís Companys, cuyos boletos se agotaron, de nuevo, en tiempo récord hasta colgar el cartel de 'todo vendido': 50.000 entradas por jornada, hasta un total de 200.000, confirmando las ganas del público de la ciudad condal de volver a disfrutar de Chris Martin y su grupo tras siete años. El proceso, que no limitaba el número de entradas por compra ni persona, era propicio para que los 'reventas' hicieran su agosto: entradas que costaban 90 euros en la página oficial se vendían a los cinco minutos en otras webs a más de 290€

Este periódico ha hecho una consulta para adquirir este tipo de entradas en el portal Viagogo, que acumula miles de reclamaciones y denuncias en redes sociales por inflar los precios de las entradas y no poner solución a la venta de entradas falsas, dejando tras de sí a miles de consumidores que perdieron su dinero. Los resultados para el primer concierto del grupo británico, que tiene lugar el miércoles 24 de mayo de 2023, muestran unos precios que oscilan entre los 282 y los 4.135 euros

La reventa online está bajo un vacío legal

En España está prohibida la "venta y reventa callejera o ambulante de localidades", según el artículo 67.2 del Reglamento General de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas. Sin embargo, si se toma la interpretación literal de la norma, ésta no aplica a la reventa online, por lo que ésta se sitúa bajo un vacío legal que, hasta el momento, no se ha modificado a nivel estatal. Sí hay varias autonomías que, tras modificar sus leyes, han incluido este supuesto en su normativa, aunque no han conseguido ejecutarla 

El Ayuntamiento de Madrid intentó sancionar en 2017 a una de estas ticketeras que se lucraban con la reventa, Seatwave, que pertenecía al conglomerado de Ticketmaster y Live Nation, como respuesta a una denuncia formulada por FACUA y Doctor Music, otra promotora de conciertos. Los intentos del consistorio de contactar con la compañía fueron en vano, ya que nunca recibió formalmente la comunicación y su matriz afirmaba que no tenía relación alguna con ella. Un año más tarde, la propia Ticketmaster anunció que cerraba la plataforma, aunque la sombra de la sospecha sigue sobre sus posibles vínculos con Viagogo. 

Para solventar esta situación, la organización de consumidores OCU solicitó el pasado julio al Ministerio de Consumo que definiera los servicios básicos en los festivales de música al aire libre para evitar los distintos abusos que afectan a los espectáculos en vivo y no sólo se limitan a la reventa. Cambios de programación, falta de puntos de agua potable, comisiones abusivas, cobros por vasos reutilizables o la imposibilidad de introducir alimentos son otros de los aspectos por los cuales ha elevado su protesta al mismo tiempo que solicita una normativa específica que establezca distintas compensaciones en caso de malas prácticas. 

Ticketswap, la app de moda entre los acoplados de última hora

Los requerimientos de control sanitario derivados de la pandemia y el auge de las denuncias en redes sociales han llevado a varias promotoras a cambiar su política de venta de entradas, apostando por identificar al comprador con la entrada y penalizando el cambio de nombre con un coste que puede variar entre 15 o 30 euros. Es el caso de la empresa The Music Republic, promotora de grandes festivales como el FIB, Arenal Sound o Granada Sound, que impuso ésta medida de forma permanente desde el año pasado y ha resultado efectiva para limitar la reventa, aunque no todos los asistentes lo aceptan de buena gana al no poder ceder la entrada a un conocido o familiar. 

Mientras unos y otros se reinventan, le ha salido una dura competencia a Viagogo y sus homólogos. Ticketswap, una aplicación fundada en 2012 por tres fans de la música neerlandeses se ha convertido en la favorita de muchos consumidores de música y eventos en directo durante este verano, llegando a intercambiar hasta 500 entradas durante una de las jornadas del Sonorama Ribera celebrado hace dos semanas. Su funcionamiento se basa en un modelo similar al de Blablacar, al permitir valorar al vendedor, pero además tiene activos mecanismos de verificación de entradas, garantía frente a entradas falsas y control de precios, que teóricamente no deberían sobrepasar el 20% del precio de las entradas originales. 

En la misma línea, la ticketera Wegow, una startup bilbaína que ya acumula ventas a más de cuatro millones de usuarios, puso en marcha hace unos meses su servicio WeSwap para intercambiar entradas al mismo precio, siempre que el ticket haya sido comprado a través de su plataforma y no queden más localidades disponibles. "De esta manera, todos resultan beneficiados: el fan que no puede acudir, el que se quedó sin entrada y el promotor del evento", apuntaban en junio, cuando lanzaron la plataforma.

Mostrar comentarios