

La realeza europea tiene una cita el próximo sábado. En príncipe Harry de Gales y la actriz estadounidense Meghan Markle contraerán matrimonio en el Castillo de Windsor en un acontecimiento que promete dar de qué hablar durante muchas semanas. La boda del nieto de Isabel II era de las más esperadas en Reino Unido y su repercusión económica para el país puede llegar hasta los 500 millones de euros. Si bien, a pesar de tanto eco mediático, no alcanzará a la de su hermano Guillermo con Kate Middleton en 2011.
Porque, a diferencia de su hermano, Harry no es heredero a la Corona británica, sino que ocupa el sexto lugar en la línea de sucesión, por detrás de su padre, su hermano y sus sobrinos, George, Charlotte y el recién nacido Louis. Eso restará presencia real a la boda, pues muchas casas europeas no enviarán a sus principales representantes por tratarse de una boda de 'perfil bajo' dentro de su ámbito. Pero, ¿qué pasará con la Familia Real española?
En el caso de don Felipe y doña Letizia todo parece indicar que también causarán baja. Y no porque quieran, sino porque la obligación les llama. Sobre todo en el caso de la Reina, quien tiene una apretada agenda inmediatamente después de la boda que le llevará al otro lado del mundo.
Hay que tener en cuenta que entre los Windsor y los Borbón hay una estrecha relación que se ha fraguado durante siglos, de hecho nuestro Rey es padrino de bautismo del príncipe Guillermo. Por ello, muchos pensaban que los soberanos españoles acudirían al enlace. Pero el deber les llama, y justo un día después de la boda la Reina Letizia emprende el que será su tercer viaje de cooperación internacional en solitario, que le llevará hasta República Dominicana y Haití. Un compromiso que le impide asistir al evento teniendo en cuenta el viaje que tiene al día siguiente por delante.
Primer aniversario separados
El viaje de la Reina se extenderá del 20 de mayo al 24, lo que supone que pasará separada del Rey una de las fechas más importantes para los soberanos. Se trata de su propio aniversario de boda, que se celebró el 22 de mayo de 2004, lo que supone que este año se cumplen 14 años desde esa fecha. Un día especial que por trabajo tendrán que pasar cada uno en una parte del mundo.
Pero, además de estos compromisos, es posible que los Reyes ni tan siquiera hayan sido invitados. Porque de hecho la Casa Real sueca ha afirmado que no ha recibido invitación alguna, por lo que mencionábamos de que se trata de una boda de bajo nivel en el ámbito de la realeza. Si bien España sí podría tener representación en la figura de la Reina Sofía, ya que es prima del Duque de Edimburgo y guarda muy buena relación con los Windsor.
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