Aldo Rodríguez Villouta
Caracas, 26 abr.- La oposición venezolana hizo gala hoy de divergencias sobre cómo encarar al Gobierno del presidente Nicolás Maduro y mientras un sector marchó en su repudio otro pidió a Dios que ilumine al mandatario para que termine por aceptar una amnistía política.
"A Dios rogando y con el mazo dando (...); esperamos que Dios ilumine al presidente", dijo a periodistas Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la MUD, la alianza partidista que reúne a la mayoría de partidos de oposición, al dar inicio a una campaña de recolección de firmas de ciudadanos a favor de la amnistía.
La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ha planteado el asunto en los diálogos que oficialistas y opositores cumplen este mes con la bendición del Vaticano y el apoyo de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), pero ya recibieron la negativa de Maduro.
"El Gobierno no quiere, no está de acuerdo en eso. Nosotros tenemos derecho a buscar que la gente en la calle respalde una ley de amnistía" y a la vez insistir en la mesa de diálogo que cambie de opinión, porque "es algo que le conviene al país", remarcó Aveledo.
El titular de la plataforma opositora también pidió respeto a Maduro, quien ha alzado la voz y ha mostrado la puerta de salida del diálogo a quienes insisten en el perdón para quienes han apelado a la fuerza a la hora de rechazar la Revolución Bolivariana.
"Conversando siempre podemos entendernos, aun en medio de grandes desacuerdos. A gritos no. A gritos no se entiende nadie. Nosotros conversamos, no gritamos. Así que con nosotros es conversando y no gritando (...); tiene que ser respetándonos mutuamente" y más porque "todo el mundo nos está viendo", insistió Aveledo.
El jefe de la MUD recordó al respecto que todas las encuestas coinciden en que 8 de cada 10 venezolanos "quiere que haya diálogo y que el diálogo arroje resultados".
Entre quienes rechazan el diálogo sin garantías previas figura un sector estudiantil que hoy marchó por dos municipios del acomodado este de Caracas, acompañados de los dirigentes María Corina Machado, recientemente despojada de su condición de diputada, y el alcalde mayor de Caracas, Antonio Ledezma, señalados como "radicales" dentro de la MUD.
Ambos han cerrado filas junto al partido Voluntad Popular, del apresado dirigente Leopoldo López, en el sector que dentro de la MUD se opone a dialogar con "el dictador", como llaman a Maduro
La marcha cambió su ruta debido a que agentes de la Guardia Nacional (GNB, policía militarizada) y de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) bloquearon el acceso al centro de Caracas, lo que obligó a los estudiantes a no salir de las calles de los municipios Baruta y Chacao, ambos administrados por opositores a Maduro.
Los alcaldes Gerardo Blyde (Baruta) y Ramón Muchado (Chacao) autorizaron la marcha, pero no asistieron a ella, al igual que otros opositores que privilegiaron secundar otras manifestaciones, entre ellas la liderada por Aveledo a favor de la amnistía política.
Ese indulto, no obstante, favorecería al apresado líder del partido Voluntad Popular, aunque su esposa, Lilian Tintori, expresó en la marcha estudiantil de hoy que confiaba en que López quede libre el próximo 8 de mayo, fecha de su primera audiencia judicial.
López está preso en una cárcel militar cercana a Caracas desde el 18 de febrero pasado, acusado de instigar los hechos de violencia que comenzaron el 12 de febrero y que a la fecha se han cobrado, principalmente en las "guarimbas" (barricadas) 41 vidas, 710 heridos y 2.626 detenidos, de los cuales 180 siguen presos.
Estos y la mayoría de los liberados afrontan causas penales que Aveledo remarcó que deben ser anuladas con la eventual amnistía, lo mismo que "las más de dos mil personas" que dijo fueron puestas en libertad condicional tras los hechos de violencia registrados tras las elecciones que hace un año fueron ganadas por Maduro.
El alcalde mayor de Caracas, otro crítico de que la MUD dialogue con el Gobierno sin antes haber logrado la liberación de los llamados "presos políticos", recordó que la marcha de hoy también rechazó una reciente decisión del Supremo de Justicia de prohibir las manifestaciones que no tengan permisos previos.
"Es una provocación al espíritu de diálogo que algunos compañeros de la MUD han puesto de manifiesto; es una manera de burlarse del diálogo", declaró Ledezma a los periodistas tras sostener que el Gobierno de Maduro controla al Supremo y todos los demás poderes del Estado.
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