Más de siete años, eso es lo que necesitó el padre de la tuitera japonesa Kya7y para dibujar este impresionante laberinto en un folio de tamaño A1 (594x841), según Kotaku. ¿Alguien será capaz de llegar a la meta?
La tuitera explica que ha hecho unas cincuenta copias del laberinto, aunque no estaba segura de cómo pasarlo a papel, con lo que usó técnicas de impresión que ya no se usan hoy en día.
Este laberinto tiene ya treinta años y parece ser que hay otro parecido.
El recorrido es tan complejo que ni siquiera su creador ha conseguido llegar a la meta, aunque eso no significa que no sea posible resolverlo.
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