Siria. Bardají (faes) cree innecesaria una resolución de la onu para intervenir en el conflicto

El director de Política Internacional de FAES, Rafael Bardají, afirmó hoy que para una intervención militar de EEUU en Siria “no sería imprescindible una resolución favorable” del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
En declaraciones a Servimedia, Bardají aseguró que una vez se ha cruzado “una línea roja” con el empleo de armas químicas, no sería “imprescindible” la resolución para realizar una intervención militar, desde una perspectiva legal.
Al respecto, explicó que “no hay indicios” de que se esté organizando un ataque a gran escala por parte de EEUU, “a tenor de las fuerzas” destinadas en la zona. Para Bardají, en EEUU existe un “gran hastío” entre demócratas y republicanos tras las intervenciones en Afganistán e Iraq, algo que no facilita una actuación en el conflicto sirio.
El analista calificó como “un fracaso absoluto” la estrategia de Obama en Oriente Medio, donde explicó que “se ha acabado con el orden y la estabilidad” tras las revueltas árabes. Además, en su opinión, la intervención en Sira debería haberse producido “al inicio” del conflicto y no ahora.
Según Bajardí, desde una perspectiva estratégica y conociendo los apoyos que tienen ambos bandos, “lo más prudente es garantizar que ninguno de los dos bandos es capaz de ganar o perder”.
Bardají también descartó la intervención de Gran Bretaña y Francia al margen de EEUU y señaló que pese a la indignación internacional tras el uso de armas químicas, hay que “meditar los objetivos” antes de realizar cualquier ataque.
El analista recordó que no se dan las mejores condiciones en la zona para lanzar una ofensiva a gran escala tras el reciente golpe en Egipto y la inestabilidad de países como Iraq, y apuntó que los esfuerzos se deben concentrar en obligar al régimen sirio a no usar su enorme armamento nuclear.
Con respecto al papel de España, Bajardí afirmó que “no debería intervenir” a no ser que se establezcan unos objetivos concretos de actuación, un tema sobre el que no hay acuerdo ni en Europa ni EEUU.