"Gracias a todos los que os habéis preocupado. Sufro una pequeña intoxicación por inhalación de humo, pero conseguimos sacar a la mujer de la casa. Nos han trasladado al hospital. Estoy bien". Con este 'tuit', el alcalde de Newark (Nueva Jersey, EEUU) Cory Booker quiso tranquilizar a sus seguidores después de que la noticia de que habíaresultado herido en un incendio inundase las redes sociales la pasada madrugada.
Booker se encontraba en su casa cuando observó por la ventana las llamas que salían de un edificio de dos plantas cercano. No se lo pensó, y acudió a prestar ayuda. Su escolta, el detective Alex Rodríguez, trató de impedírselo, pero no lo consiguió.
El alcalde Newark y el agente encargado de su seguridad accedieron al bloque de apartamentos en llamas y consiguieron poner a salvo a cinco personas. Pensaban que no había nadie más en la casa cuando oyeron un grito en el piso de arriba. "Creíamos que todo el mundo estaba fuera cuando escuchamos 'estoy aquí'. Era la hija de una de las residentes", ha recordado Booker al diario local 'The Star-Ledger'.
En un gesto heroico, el regidor cruzó las llamas, subió las escaleras y llegó hasta la mujer atrapada. "La agarré y la saque de la cama", rememora el político 'action man' de Nueva Jersey, quién reconoce que pasó miedo. "Cuando miré atrás y vi las llamas pensé: 'no vas a salir de aquí'. Durante unos instantes creí que la única opción era saltar por la ventana", asegura.
Sin embargo, al final decidió emprender el camino de vuelta por las escaleras y llegar sano y salvo a la calle, a pesar de una leve intoxicación por inhalación de humo y quemaduras de segundo grado en las manos. Booker y la mujer a la que rescató necesitaron asistencia sanitaria y fueron trasladados a un hospital local, donde pasaron la noche en observación.
Héroe popular
Este gesto desinteresado y poco común entre la clase política ha convertido a Cory Booker, de fútbol americano en su etapa universitaria, en un ejemplo para su comunidad. Sus seguidores han dejado decenas de mensajes en Twitter felicitándole por su valentía, entre ellos el alcalde de Los Ángeles, Antonio Villarraigosa, quien le deseaba "una pronta recuperación" y la agradecía su "extraordinario acto de heroísmo".
Antes de convertirse en político, Booker se ganó una merecida fama como defensor de los más necesitados al promover las asociaciones de vecinos en los barrios más deprimidos de Nueva Jersey. En lugar de buscar un trabajo bien pagado en la vecina Nueva York, el ahora alcalde de Newark decidió instalarse en un apartamento de protección oficial del vecindario más pobre de la ciudad tras finalizar sus estudios en la prestigiosa universidad de Yale.
Su activismo social a favor de los más desfavorecidos le llevó al consejo local y, tras un intento frustrado, a la alcaldía en 2006. Desde allí ha luchado por mejorar el acceso a la sanidad de sus ciudadanos y por eliminar las armas de las calles.
Su compromiso con Newark le llevó incluso a rechazar la propuesta de Barack Obama para convertirse en su asesor urbanístico, convirtiéndose en 2010 en el séptimo mejor regidor del planeta según la Fundación Mundial del Alcaldes.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios