El pasado fin de semana se vivió un hecho insólito en el circuito del Jarama de la Comunidad de Madrid. Un Ferrari 360 Módena F1 se salió en una curva del trazado y terminó en la vía de servicio de la A1. Los operarios del circuito y las asistencia del RACE actuaron lo más rápido posible para quitar el coche de la vía.
"La puzolana -la zona de grava que separa el asfalto de las protecciones- tiene unos 40 ó 50 metros. Luego hay dos o tres filas de neumáticos delante del guardarrail y luego hay otra hilera igual antes de la valla. La mala suerte es que el coche pegó contra el guardarrail y, sin saber cómo, hizo efecto catapulta", relatan quienes presenciaron el accidente a MARCA.
El accidente ocurió en unas tandas privadas y se saldó sin heridos de gravedad pese a la espectacularidad de las imágenes. El circuito cumple con todas las normativas de seguridad y todo se debió a un cúmulo de mala suerte. El morro del coche golpeó primero contra la zona de césped antes de terminar boca abajo en el asfalto.
La empresa Tandas Privadas es quien organiza el evento y cuentan a MARCA que exigen el carné de conducir tipo B para conducir el Ferrari y que los pilotos reciben una charla sobre seguridad y conducción deportiva antes de subirse al coche.
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